La normativa boliviana en vigencia admite la realización de minería en áreas protegidas, siempre que se cumpla las normas ambientales conexas y cuando la minería no afecte los objetivos de protección del área.
Fuente: Sumando Voces
Mery Vaca
Un informe de la Defensoría del Pueblo, titulado “Nuestra casa sin derechos” referido al parque Madidi, indica que en todos los casos analizados, existe incompatibilidad entre la actividad minera y la categoría de Parque Nacional (PN) y Área Nacional de Manejo Integrado (ANMI). Los casos analizados son 61.
“PN –ANMI Madidi el total de los Certificados de Compatibilidad de Usos (CCU) conocidos por la Defensoría del Pueblo señalaba la incompatibilidad de la minería tanto en la categoría Parque Nacional como Área Natural de Manejo Integrado”, concluye el reporte que fue presentado esta semana.
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Esto significa que no puede existir actividad minera en el Madidi, salvo en los casos de las denominadas áreas preconstituidas, es decir, aquellas que existían antes de que el Madidi fuera declarado Parque Nacional.
Sin embargo, dice el informe, “el número de áreas mineras preconstituidas al interior del Parque Nacional Madidi es bastante menor frente al número de trámites de contrato minero que pretenden instalarse en esta área protegida”.
En 2022, la Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM) reportó que existían 195 trámites de contrato minero en el Madidi, frente a los 31 derechos preconstituidos y el 2023, la misma institución informó que “se había establecido una restricción absoluta para el trámite de áreas mineras al interior del Parque Nacional Madidi, además de que se había iniciado un proceso de análisis integral respecto a los trámites mineros iniciados, incluyendo la valoración de los Certificados de Compatibilidad de Usos emitidos por el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (SERNAP)”.
El informe de la Defensoría acompaña un cuadro con 61 casos de trámites mineros que no son compatibles con el parque, elaborado con base en información del SERNAP.
“Como pudo evidenciarse, las solicitudes de contrato minero en el marco de la Ley N°535 dentro del Parque Nacional Madidi, sea que se ubiquen en la categoría PN o ANMI, e incluso, se ubiquen en cualquiera de las zonas establecidas en el RGAP (Reglamento General de Áreas Protegidas), son incompatibles con la actividad minera. Es decir, el criterio técnico emanado por el SERNAP y la Dirección del AP (Áreas Protegidas), es que no pueden instalarse actividades mineras nuevas dentro de Parque Nacional Madidi”, señala el documento, al que accedió Sumando Voces.
La normativa en vigencia admite la realización de minería en áreas protegidas, siempre que se cumpla las normas ambientales conexas y cuando la minería no afecte los objetivos de protección del área. Uno de los requisitos establecidos en la norma es el Certificado de Compatibilidad de Usos (CCU), el cual es un documento técnico emitido por el SERNAP que geo-espacialmente establece la compatibilidad de una determinada Actividad Obra o Proyecto con los objetivos de creación e instrumentos de gestión, con la categorización y zonificación de un área protegida.
Sin embargo, y pese a la prohibición expresa de que se establezcan actividades mineras en el parque, la realidad es que ésta existe y que, lejos de ser una actividad invisible, se exhibe con gran cantidad de maquinaria, gente y hasta personas armadas, según el mismo reporte.
Citando al SERNAP, el documento indica que “ha habido un incremento en el número de personas interesadas en trabajar la explotación minera en el Parque Nacional Madidi, situación que se evidencia en la cantidad de apersonamientos de interesados en oficinas del área protegida, aumento de maquinaría que ingresa al parque, así como de combustible”.
Sin embargo, el mismo SERNAP habría señalado que “sus acciones se han visto rebasadas ante la movilización social que acompaña el ingreso de maquinaría al territorio”.
El Parque Nacional Madidi, que fue creado el año 1995, alberga una importante biodiversidad, ello se debe a su variedad de pisos ecológicos distribuidos desde los 6.000 m.s.n.m., de la cordillera de Apolobamba, hasta las pampas amazónicas a una altura de 300 m.s.n.m. En esta AP se han logrado identificar más de 9.000 especies, además, en este territorio se halla el 40% de las especies de plantas, el 48% de especies de mariposas, el 50% de los vertebrados, así como el 71% de las aves del país44, según el documento de la Defensoría.
“Un espejismo de desarrollo”
El reporte indica que la minería se posiciona “como un espejismo de desarrollo para las familias” del Madidi, sin embargo, “no se evalúa los impactos potenciales de la minería a cielo abierto sumada a los efectos del uso de mercurio en la concentración de oro aluvial”.
Agrega que las condiciones de vida de las familias indígenas y campesinas del Madidi son precarias, con pocas posibilidades de acceso a planes de aprovechamiento sustentable para la mejora de las salud, educación, comunicación, vivienda digna, etc.
Incluso, el reporte advierte sobre la presencia de personas que portan armamento “posicionadas en el ingreso a los territorios, donde se efectúa la minería, que impiden la libre circulación, lo que denota una escasa presencia de las autoridades competentes para ejercer control y fiscalización”.
El informe también alerta sobre los efectos de la minería sobre los derechos humanos, derechos de la madre tierra y el entorno en general.
Pide que se evite el uso de mercurio en la minería aurífera que se desarrolla en las áreas protegidas y hace recomendaciones para las autoridades planteen políticas en torno al tema.