Se trata de un crédito de $us 40 millones con el que el INRA planea sanear tierras; sin embargo, la diputada María René Álvarez advirtió que esto apunta a la reversión y expropiación de predios.
Fuente: Unitel
“Ponete un yúrex en tu boca”, esas fueron las palabras del máximo ejecutivo del Instituto Nacional de Reforma Agrarias (INRA), Eulogio Núñez, para que miembros de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob) presionen a la Asamblea Legislativa y, específicamente, a la diputada opositora María René Álvarez (Creemos) para viabilizar la aprobación de un crédito externo por $us 40 millones.
Se trata de un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), denominado ‘Programa boliviano de administración de tierras para el desarrollo rural sustentable’, el cual fue suscrito en mayo de 2024 y que actualmente se encuentra en la agenda semanal de la Cámara de Diputados.
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Tal préstamo externo viene siendo cuestionado por Álvarez, quien representa a la Chiquitania y en diferentes ocasiones denunció que este financiamiento lo utilizarán para la reversión y expropiación de predios productivos en el departamento cruceño, advirtiendo falta de transparencia en la labor del INRA.
“Nada es casualidad y conminamos a los parlamentarios, sobre todo a los cruceños, a rechazar de manera definitiva este crédito que representa un nuevo ataque a Santa Cruz”, fue la voz lanzada por la parlamentaria en días pasados.
El director del INRA aludió a la diputada opositora, quien rechaza la aprobación del crédito
El director del INRA estuvo en un acto realizado en la Cidob el pasado 14 de marzo y expresó que no se está avanzando en el saneamiento debido a esta situación, cuestionando que se vote en contra del crédito y aludiendo a la diputada.
“Les pedimos que puedan dirigirse al Órgano Legislativo. (El crédito) está bloqueado ahí, porque la presión viene al Órgano Ejecutivo”, sostuvo Núñez. “Les pedimos su granito de arena, mandar una nota por escrito, decirles ‘en esto no te opongás, ponete un yúrex en tu boca’”, agregó.
Núñez sostuvo que en Santa Cruz empezó una ‘contracampaña’ en torno al crédito y aludió a los medios de comunicación que dieron cobertura a Álvarez, a quien tildó de ser una “supuesta chiquitana”.
La diputada lamentó que Núñez se refiera de esta manera hacia una autoridad electa solo por poner en evidencia las irregularidades en torno a la labor del INRA, considerando que es una manera abusiva para facilitar un esquema avasallador. “Es un golpe contra el modelo económico de Santa Cruz”, remarcó.
Para Álvarez, la posible aprobación representa un grave riesgo para la propiedad, ya que sabemos que el INRA actúa políticamente y no de forma técnica, como debería ser, favoreciendo a grupos de avasalladores que asedian a diferentes regiones, incluida la Chiquitania.
“Ya tienen todo configurado, están con la mira para titular la tierra en favor de sus grupos políticos y dejar afuera a la gente del lugar que viene desde hace 30 – 40 años buscando que se les titule una parcela”, lamentó la parlamentaria.