Frente a esta situación, las autoridades hicieron un llamado de prevención a la población. “Instamos a la población a no proporcionar sus fotocopias de carnet a personas desconocidas, no realizar depósitos o transferencias a números particulares o a QRs que no sean institucionales”, concluyó el oficial policial y recordó que los trámites legítimos se realizan únicamente a través de canales y cuentas oficiales de las instituciones correspondientes.
La Policía Boliviana alertó a la ciudadanía sobre una nueva modalidad de estafa telefónica en la que reclusos del penal de Palmasola, en Santa Cruz, ofrecen de manera fraudulenta la tramitación de licencias de conducir, certificados de antecedentes policiales y otros documentos oficiales a cambio de dinero. Las autoridades instaron a la población a no facilitar datos personales ni realizar transferencias a cuentas no institucionales ante estas ofertas ilegales.
“Ante la proliferación de un nuevo modus operandi de estafa. Consiste en ofrecer de manera ilegal la tramitación de presuntos antecedentes policiales. Se logró identificar que los sujetos que operan serían reclusos del centro penitenciario de Palmasola”, afirmó, en conferencia de prensa, un oficial a cargo del área que explicó el modus operandi identificado.
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El uniformado, confirmó el origen penitenciario de la red delictiva y explicó que el esquema se articula a través de llamadas y mensajes en los que los estafadores, que se hacen pasar por funcionarios, solicitan a las víctimas fotocopias de su carnet de identidad con el falso pretexto de verificar antecedentes. Posteriormente, les ofrecen la «gestión» expedita de licencias de conducir u otros certificados especiales a cambio de un pago.
“Articulan un esquema delictivo basado en llamadas telefónicas, mensajes. Solicitan a las víctimas fotocopias de su carnet de identidad bajo el falso pretexto de verificar antecedentes penales”, detalló el oficial.
Este caso no es aislado y forma parte de una problemática mayor de ciberdelincuencia vinculada al penal. En mayo pasado, un operativo permitió descubrir una extensa red de estafas cibernéticas en Santa Cruz, la cual, según la investigación, tenía a más de 200 víctimas. Durante esos allanamientos se arrestó a varias personas y, de manera significativa, se identificó la participación de al menos cuatro reclusos de Palmasola, lo que motivó un operativo dentro del mismo recinto penitenciario.
En las investigaciones más recientes, la Policía logró individualizar a uno de los presuntos operadores dentro de la cárcel. Se trata del interno Miguel Ángel Saavedra Véliz, a quien se encontró en posesión de más de diez teléfonos celulares. La pesquisa detectó que uno de los números de WhatsApp clonados enviaba códigos QR a nombre de este reo para recibir pagos, una técnica que hasta entonces no había sido claramente atribuida.
Frente a esta situación, las autoridades hicieron un llamado de prevención a la población. “Instamos a la población a no proporcionar sus fotocopias de carnet a personas desconocidas, no realizar depósitos o transferencias a números particulares o a QRs que no sean institucionales”, concluyó el oficial policial y recordó que los trámites legítimos se realizan únicamente a través de canales y cuentas oficiales de las instituciones correspondientes.
De esta manera, las autoridades enfrentan el reto de cortar estas operaciones ilícitas que se originan desde detrás de las rejas y que aprovechan la desinformación y la urgencia de los ciudadanos por realizar trámites.