¿Quién dijo que tener una ‘hot session’ con la misma persona por años es aburrido?
No cabe duda que el sexo es súper divertido y una de las mejores cosas en el mundo. Ya sea contigo misma, con tu pareja de más de 5 años o un ‘fuck buddy’, el sexo siempre es increíble y alivia el estrés. Con eso dicho, mucha gente piensa que la monogamia tiende a hacer del sexo algo aburrido y rutinario.
Sin embargo, aquí te explicamos por qué el sexo en una relación larga ha sido devaluado de manera injustificada.
1. Las mujeres que están en una relación larga tienen más probabilidad de tener un orgasmo.
Un estudio de 2013 reveló que las mujeres en relaciones serias eran más probables en alcanzar un orgasmo durante el sexo, que las mujeres que tenían sexo en una ‘one night stand’.
2. Saben perfecto lo que les gusta.
No existe ese proceso de experimentación; ya sabes perfecto lo que vuelve loco a tu pareja, cuales son sus posiciones favoritas y a que ritmo les gusta. Ya superaron esa fase de probar y descartar que puede retrasar el clímax de ambos.
3. Puedes adivinar con facilidad qué es lo que a tu pareja le gustaría experimentar.
Sólo porque estés en una relación larga, no significa que ya no haya sorpresas. Ya sabes que le gusta a tu pareja, por lo que será más fácil adivinar qué cosas le gustaría probar.
No existe nada más divertido que descubrir cosas nuevas en la cama con alguien que amas.
4. Pueden satisfacer sus antojos sexuales con confianza.
¿Quién rechazaría una buena noche de sexo, vino y Netflix? Con el plus de que puedes proponerlo sin pena.
5. Make-up sex.
Pelear con tu pareja nunca es divertido, pero seamos realistas y aceptemos que nada se compara con el sexo de reconciliación.
6. Te sientes cómoda.
No sentirás es incómoda necesidad de irte a tu cama corriendo después de terminar, o esa absurda necesidad de cubrir tu cuerpo después de una ‘hot session’.
Han visto su cuerpo desnudo tantas veces que te sientes súper segura de ti misma estar paseándote enfrente de él así todo el día.
Él no te juzgara por estar despeinada y sudada después de un rato de pasión, porque te ama tal y como eres, y lo más probable es que el esté igual que tú.
7. Sabes perfecto qué sucede en el departamento de enfermedades.
En una relación monógama, ya han tenido esa platica súper importante de que posibles enfermedades sexuales podrían tener y seguro ya hasta se han hecho exámenes para asegurar el diagnóstico.
Nada mejor que cuidar de su salud mutuamente. ¡Cero preocupaciones!
8. No hay juegos.
No tienes que elaborar un plan complejo para escapar justo al terminar la cita, tampoco tienes que preocuparte sobre si en verdad le gustas o si lo volverás a ver.
No tienes que descifrar mensajes confusos, ni tener miedo a verte demasiado intensa. Ya no hay juegos, sólo pasión y sexo.
9. Los momentos incómodos ya no lo son.
Ahora son divertidos. Sabemos que en el sexo pueden surgir ruidos extraños que al principio pueden ser algo vergonzosos. Sin embargo, despúes de un rato existe tanta confianza que todo lo que antes te daba pena, ahora es chistoso.
10. Acurrucarse.
¿Existe algo mejor que acurrucarse después de tener sexo? En una ‘one night stand’, este paso está prohibido si es que no quieres complicar las cosas.
11. El sexo puede ser una expresión de verdadero amor.
El sexo sin compromiso es únicamente contacto físico, no intervienen sentimientos.
Sin embargo, cuando estás dentro de una relación larga, el sexo se convierte en una conexión emocional que supera las palabras.
12. El sexo se convierte en una exploración mutua.
Puedes explorar tu sexualidad por medio de ‘one night stands’. Sin embargo, cuando tienes sexo dentro de una relación larga, tu exploración sexual puede complementarse gracias a tu pareja.
Ambos crecerán y se conocerán mucho mejor que antes se una manera segura y confiable llena de comunicación.
13. Llegan a conocerse en un nivel mucho más profundo que con cualquier otra persona.
Puedes conocer el color favorito, los sueños y ambiciones de alguien más. Sin embargo, agregarle el componente sexual, significa que conoces a esa persona en un nivel mucho más profundo que todos los demás.
En una relación larga habrás visto a tu pareja en su estado más vulnerable y físico.
Fuente: Cosmopolitan