Experto recomienda al Presidente iniciar gestiones para reunirse con Obama.
Desde la asunción del presidente Evo Morales, el 22 de enero de 2006, la relaciones diplomáticas con Estados Unidos no han sido de las mejores, es más, en dos años y nueve meses terminaron de deteriorarse.
OPINION
La declaración de persona no grata y expulsión del ex embajador de Estados Unidos en Bolivia, Philip Goldberg, por presunta conspiración contra el gobierno de Morales fue la gota que rebalsó el vaso para que el gobierno de George Bush responda y arremeta con Bolivia determinando su descertificación y la solicitud de suspender el acuerdo de preferencias arancelarias (Atpdea) para la exportación de productos bolivianos al país del Norte. Asimismo, decida expulsar de Estados Unidos al embajador boliviano, Gustavo Guzmán.
Como ingrediente adicional al conflicto diplomático, el 2 de noviembre, Morales determinó la salida de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos, DEA, acusándola de fomentar y proteger al narcotráfico.
Estos hechos han provocado que las relaciones entre ambos países alcancen un grado de deterioro nunca antes visto.
Ante este panorama a Bolivia le queda redefinir su política con el país del Norte y el futuro presidente norteamericano, Barack Obama, así entiende el ex canciller durante el gobierno de Eduardo Rodríguez Veltzé, Armando Loayza.
Desde su óptica, el superar el impasse que todavía está latente está en manos del presidente Evo Morales, quien deberá dar un giro en su estrategia diplomática para encarar nuevas relaciones con un Gobierno que si bien se cree que América Latina no será una prioridad, la lucha contra el narcotráfico no estará ausente de su agenda, por tratarse de una política de Estado.
“Es importante que el gobierno de Morales presente un proyecto de negociación y redefinición de la problemática de cooperación con Estados Unidos, la misma que deberá ser mucho más razonable de lo que ha mantenido hasta ahora”, afirma Loayza quien muestra cierta esperanza en que el electo Mandatario afroamericano reconsidere la actual posición de su país respecto a Bolivia.
Una política menos ideologizada sería la clave para entablar un diálogo sincero y de mutua confianza con el nuevo Gobierno, el mismo que se manifieste una vez que Obama, el próximo 20 de enero, asuma la Presidencia de la primera potencia mundial.
Gobierno
Aunque se desconoce qué acciones asumirá el Gobierno boliviano, lo cierto es que horas después de conocer el aplastante triunfo del candidato demócrata, Barack Obama, frente al republicano John McCain, el presidente Morales saludó la elección del afroamericano, anunciando que las relaciones entre ambos países, que se encuentran en su punto más bajo de su historia, mejorarán con el nuevo Gobierno.
Morales calificó de histórico el triunfo electoral del senador demócrata por Illinois. «Es histórico el triunfo de Obama, a nombre del Gobierno quiero expresar mis felicitaciones, es un señor que viene de los sectores más discriminados y esclavizados, histórico por cierto», enfatizó el gobernante boliviano.
Morales indicó que su gran deseo es que el Presidente electo de Estados Unidos, que tomará posesión de su cargo en enero del próximo año, levante el bloqueo económico a Cuba y retire las tropas militares norteamericanas de algunos países, entre ellos Irak.
Asimismo, dijo estar seguro que con Obama, como Presidente de la primera potencia mundial, mejorarán las relaciones bilaterales entre los gobiernos de Bolivia y Estados Unidos, que se vieron seriamente afectadas con la declaratoria de persona no grata del embajador, Philip Goldberg, y con la reciente suspensión de las actividades de la DEA en territorio boliviano.
«Estoy seguro que mejorarán las relaciones entre el Gobierno boliviano y el Gobierno de Estados Unidos. Yo dije ya hace semanas atrás cualquiera sea el Presidente vamos a buscar mejorar las relaciones con Estados Unidos, que mejor con el señor Obama, una persona que representa a los sectores marginados, de seguro que las relaciones van a mejorar», sostuvo.
Respeto
En la misma línea gubernamental, el viceministro de Comercio de Bolivia, Pablo Guzmán, dijo que espera que el nuevo Gobierno de los Estados Unidos «dé un trato de respeto» al país.
Así como Evo, el viceministro se mostró esperanzado con que el Ejecutivo estadounidense actúe con Bolivia «con el trato que merecen todos los estados del mundo» para «reconstituir nuestras relaciones tanto políticas como comerciales”.
Guzmán aseguró que pese a la decisión del presidente Evo Morales de suspender las operaciones de la agencia antidroga DEA en el país, Bolivia hará «todos los esfuerzos a su alcance» para luchar contra el narcotráfico.
«No lo hacemos por Estados Unidos, sino porque es una lucha nacional y pondremos ahí todo nuestro esfuerzo y estamos seguros de que tendremos muy buenos resultados», afirmó.
Recomienda al Presidente iniciar gestiones para reunirse con Obama
El analista económico Julio Alvarado recomendó que el presidente de la República, Evo Morales Aima, inicie las gestiones para reunirse con el electo presidente de Estados Unidos (EEUU), Barack Obama.
De acuerdo al también experto en comercio exterior, Bolivia debe continuar con sus acciones para lograr una ampliación de la Ley de Promoción Comercial Andina y Erradicación de Drogas (Atpdea, por su sigla en inglés).
«Si el Presidente (Evo Morales) tiene un buen asesoramiento lo primero que debe hacer es gestiones para tener una entrevista (con Obama) a la brevedad posible, porque en este mundo globalizado hay que tener buenas relaciones con todos», señaló el economista.
Alvarado dijo que la ascensión al poder de Obama es una señal de cambio en la primera potencia mundial, ya que el nuevo Presidente proviene de sectores no tradicionales.
«El mensaje de Obama era de unidad, viniendo de un sector que ha sido esclavizado, discriminado, excluido en el pasado como fue la raza negra», expresó Alvarado.
Dificultades
Según el analista, los sectores demócratas, al que pertenece Obama, siempre tuvieron políticas económicas y comerciales proteccionistas, lo que podría dificultar una mejora en las relaciones con la región Latinoamericana y por lo tanto con Bolivia.
«Para Bolivia este es un tema muy delicado, porque si se aplica mayores medidas proteccionistas en Estados Unidos esto afecta al comercio de la región (Sudamericana) y también al de Bolivia», explicó Alvarado.
Sin embargo, sostuvo que existe optimismo y gran expectativa sobre la reconducción de las políticas estadounidenses.
En ese marco, indicó que Bolivia al estar atravesando una situación preocupante por el tema del Atpdea debe ratificar su compromiso de continuar con la lucha contra el narcotráfico, que es requisito fundamental para acceder al beneficio.