Samuel Doria Medina, jefe de Unidad Nacional (UN), manifestó su preocupación por la forma en que el MAS penetró en las regiones tradicionalmente opositoras.
La Razón. A su retorno de Uruguay, donde pasó las fiestas de fin de año, el político conversó con La Razón en su vivienda de Achumani. Habló de sus nuevas aspiraciones electorales en los comicios de abril y del rol que, en su criterio, le toca jugar a la oposición. Criticó la política económica del Gobierno, y en el caso de Reyes Villa consideró que para los opositores “hay una justicia como la suiza y para los oficialistas la justicia sigue siendo la boliviana”.
Evalúe usted el papel que desempeñó UN en los comicios de diciembre del 2009.
Es importante reconocer que hubo una derrota electoral y accedo a esta entrevista y a levantar mi voz nuevamente porque, si bien reconozco la derrota, eso no significa que voy a cambiar mis principios, eso no significa que voy a dejar de trabajar por lo que creo, y no para acercarme a uno o a otro, sino para seguir trabajando con la vocación de servicio público que tengo. Ahora bien, en general, los resultados para la oposición han sido malos, en mi criterio, por una decisión cortoplacista, en especial de los sectores conservadores. En la oposición hay matices, pero particularmente en los sectores más conservadores del oriente se tiene una visión muy cortoplacista. Creen que la política es algo simple que se resuelve con el primer candidato que pase por la calle, y los hechos están demostrando que ése no era el camino. Yo había planteado, en noviembre del 2008, hacer primarios para elegir al candidato de la oposición, pero después de intentarlo por varios meses se vio que no era posible. Me temo que todavía hay sectores que siguen con esa visión cortoplacista, que no se dan cuenta de que los de la oposición tenemos que cruzar un desierto y de cómo encaremos hacerlo se va a definir a dónde lleguemos. Es muy importante que la oposición, que es muy necesaria para la democracia, tenga una visión de largo aliento que no sólo se preocupe por la siguiente elección, si bien hay que avanzar en ellas. Así como el Gobierno comete el error de querer empezar de nuevo en todo, sin tomar en cuenta lo anterior, en la oposición también se yerra al querer hacer las cosas como si se comenzara de nuevo, sin una visión de mayor alcance.
¿Presentará su partido candidatos a las gobernaciones y alcaldías?
Unidad Nacional mira ahora el bosque completo. Yo creo que la estrategia de la oposición está clara; en la elección de abril tiene que lograr mantener a Santa Cruz, Beni y Pando, no dejar caer Pando, y debe recuperar la mayoría en Tarija y en Chuquisaca; si se logra hacer eso, se va a tener una oposición que al menos no retroceda a nivel regional. En el resto de los departamentos es fundamental lograr enclaves; por ejemplo en las alcaldías de Cochabamba, de La Paz y en otros lugares del país. ¿En qué porcentajes se va a lograr eso?, pues va a depender de varios factores y de decisiones que se vayan tomando en los próximos días. Ése el punto de vista global que debe tener la oposición, así va a lograr una recuperación, y si logra un porcentaje menor habrá que ver, pero creo que ése es el objetivo realista para el mes de abril. Son elecciones departamentales, regionales, y Unidad Nacional va a participar; se está viendo en cada una de las regiones si se tiene participación con otros sectores o con candidatos directos en otros. Nuestra tarea más importante no es sumarnos a lo que hay en esos departamentos, sino lograr enclaves en esta parte del país.
¿Se confirma a Óscar Ortiz como postulante a la Gobernación de Santa Cruz?
Santa Cruz es uno de los departamentos más desordenados en este momento, tal vez es positivo en el sentido de la segunda vuelta, todos quieren llegar a esos dos primeros lugares para después participar en la segunda vuelta, pero no, en Santa Cruz no hemos cerrado todavía, no tenemos definiciones y estamos viendo las opciones.
¿Cuáles más?
Varias opciones.
Frente a la observación que hace usted de la visión cortoplacista que tiene la oposición, ¿cómo prevé que va a terminar la oposición en estas elecciones regionales?; por ejemplo en Santa Cruz ya hay cuatro candidatos…
Hasta que se defina la inscripción van a haber varios cambios sorpresas. Pero en Santa Cruz, por ejemplo, está el tema de la segunda vuelta; si allí no hubiera segunda vuelta, sería fundamental que haya un solo candidato de la oposición, pero como existe este mecanismo, y suponiendo que alguno de los candidatos que esté en primer o segundo lugar sea del oficialismo y otro de la oposición, se están abriendo varias opciones interesantes como la de (Juan Carlos) Urenda. Ahora también es interesante ver cómo el oficialismo, por tratar de acaparar todo, está dejando de lado su estrategia, sus metas, yo no creo que puedan hacer la revolución socialista en el Beni con Jessica Jordan a la cabeza.
¿Por qué?
Porque son perfiles inadecuados en la visión masista, ¿no es cierto? Por ejemplo en el Beni, Carlos Navia es una persona que ha trabajado los últimos 30 años por los derechos de los indígenas, ha sido uno de los organizadores de la famosa marcha de los años 90; ése es un perfil más adecuado, más racional y no Jessica. Vemos que el oficialismo, por querer abarcar todo, está dejando de lado su estrategia, su objetivo, lo cual también va a generar oportunidades para la oposición, porque van a haber varios sectores que no lleguen a entender lo que está pasando. Y cuento lo de Jessica como anécdota pero hay otros casos. Yo veía en la televisión cómo la Ministra Anticorrupción atacaba duramente al señor (Roberto) Fernández en Santa Cruz y ahora es candidato del MAS. Eso genera confusión en el ambiente político.
Decía usted que la misión de Unidad Nacional va a ser la de hacer ciertos enclaves; ¿se tiene definido en cuáles?
No hay duda de que las ciudades más importantes son Cochabamba y La Paz. En Cochabamba están muy avanzadas las conversaciones para que haya un solo candidato de la oposición, que será Arturo Murillo, sumándose a este esfuerzo, por ejemplo, la ex diputada (Ninoska) Lazarte y varios otros sectores. En La Paz estamos trabajando también para tener un candidato que, si bien no sea de ninguno de los partidos, pueda tener el respaldo de todos los partidos.
En la Asamblea Legislativa, ¿cómo imagina usted el rol de Unidad Nacional con esta abrumadora mayoría que tiene el MAS y con esas visiones de corto plazo de la oposición, como usted las llama?
Nosotros vamos a arrancar con una tarea de fiscalización, porque entendemos que el 64% (obtenido por el MAS en las elecciones del 2009) no ha significado entregarle un cheque en blanco al Gobierno, sino un amplio respaldo para que cumpla lo que ha prometido.
Entonces vamos a ser fiscalizadores de lo que haga; además entendemos que ese respaldo no es para que se viole la ley, (para que) se tenga un Gobierno autoritario al margen de las leyes, de la propia Constitución que se convierte en una camisa de fuerza para el Gobierno. Está claro que la Asamblea Plurinacional va a tener un rol menos importante que si hubiera una oposición clara, porque hay una mayoría clara: dos tercios de parte del oficialismo.