Convalecencia: La cirugía que se realizó a la Presidenta del Senado fue complicada. Ella encomendó a Dios su retorno a la Asamblea Legislativa.
Autoridad: Romero, durante su posesión como presidenta del Senado, en enero
La Prensa
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El médico de la presidenta del Senado, Ana María Romero (MAS), Carlos Aguilar, afirmó que su paciente presenta una importante mejoría; no obstante, advirtió de que todavía no está en condiciones de retornar a sus labores en la Asamblea Legislativa. La legisladora, quien fue intervenida quirúrgicamente por una obstrucción en el intestino, envió ayer un mensaje al país en el que aclara su situación y el impedimento que tiene para retomar sus actividades en la Cámara Alta.
De acuerdo con el galeno, no se puede precisar en qué tiempo la senadora, de 67 años, estará totalmente restablecida para volver a sus actividades habituales. “Si fuera por ella, mañana mismo se va a trabajar, pero eso no es conveniente ni para su salud ni para el trabajo que realiza; en ese sentido, hay esperar un poco más de tiempo”.
Estas declaraciones fueron realizadas ayer a la red televisiva PAT.
De acuerdo con el gastroenterólogo Hernán Silvestre, consultado por La Prensa, por la cirugía que se le practicó a Romero (se le hizo dos cortes en el intestino obstruido), el periodo de recuperación suele demorar más tiempo mientras más edad tenga una persona, aunque “en medicina no hay nada exacto debido a que todos los organismos son diferentes”.
El experto explicó a este medio que las obstrucciones intestinales que forzosamente ameritan cirugía son las denominadas de íleo mecánico, ocasionadas por un endurecimiento fecal tal que paraliza la salida de las heces, por algún tumor en las paredes intestinales o por alguna cicatriz de una operación anterior en el apéndice, vesícula biliar e incluso cirugías de tipo ginecológico.
Después del 30 de enero, cuando la senadora oficialista fue intervenida, surgieron versiones en sentido de que ya no volvería a la Presidencia del Senado porque su salud se había agravado.
A esto se sumaron especulaciones sobre un distanciamiento con el presidente Evo Morales, a raíz de las declaraciones que hizo, días antes de su operación, en sentido de que hubo una “decisión política” del Ejecutivo para que la Comisión de Gobierno y Fuerzas Armadas esté conformada sólo por miembros del MAS.
Luego de más de mes y medio de silencio, la ex Defensora del Pueblo difundió ayer un mensaje al país en el que aclara que no existe ningún distanciamiento con el Jefe de Estado y que el proceso de recuperación de la cirugía sería el único motivo por el cual aún no reasume su cargo.
“Una serie de versiones carentes de veracidad que han circulado por los medios hacen que la gente se pregunte cómo estoy y qué me ha pasado realmente. Primero que nada diré que ni he tenido un distanciamiento con el Presidente ni me he buscado un pretexto para evadir el tratamiento de las leyes que están en agenda en el Senado”.
La semana pasada, la senadora opositora Centa Reck (PPB-CN) manifestó que era necesario un pronunciamiento por parte de Romero, ya que su larga ausencia y algunos cambios que se habían producido en la Oficialía Mayor del Senado y en la Presidencia hacían pensar que no habría un retorno.
El primer cambio que hubo en su ausencia fue el retiro del oficial Mayor de la Cámara Alta, Josué Mamani, persona de confianza que fue designada por Romero.
También hubo cambios en el equipo de seguridad que se le asignó a la senadora. Además, el presidente interino del Senado, René Martínez, trasladó su oficina a los ambientes destinados a la Presidencia de esa instancia legislativa. Por los pasillos del Legislativo se comenta que el senador chuquisaqueño tenía la intención de permanecer definitivamente al mando de la Cámara Alta y para ello buscaba apoyo de algunos senadores. Además, la autoridad legislativa reforzó su seguridad personal.
En un contacto con radio Erbol, Romero dijo que, además de las versiones en torno a su enfermedad, se comentó que había salido del país y que se encontraba en Madrid, España, mientras otros decían que se fue a La Habana, Cuba.
“Otros han dicho que no me ha pasado nada y que estoy recluida en mi casa haciéndome la enferma porque no quería aprobar las leyes que se han aprobado, y así una serie de infamias”.
La verdadera razón de su ausencia, afirmó, es que se está restableciendo de una intervención quirúrgica por oclusión intestinal que fue riesgosa.
“Los médicos me han dicho que (si demoraba) un día más y no contaba el cuento, vale decir que hubiera fallecido”.
En su nota, Romero indica que “los médicos no quieren darme una fecha exacta para darme de alta porque dicen que éste es un proceso lento y la recuperación depende de cada organismo”. “Significa que, en un tiempo más, si Dios lo quiere, estaré de vuelta en el Senado para cumplir el mandato que me dio el pueblo”.
Romero asegura que no tiene diferencias con el presidente Morales.
Para destacar
Ana María Romero fue intervenida quirúrgicamente el 30 de enero pasado por un cuadro de obstrucción del intestino.
Pidió licencia indefinida y en su lugar asumió la Presidencia del Senado el senador chuquisaqueño René Martínez (MAS).
Su larga ausencia hizo que surgiera una serie de versiones sobre su verdadero estado de salud.
El silencio que guardó la senadora provocó también que se especulara sobre un distanciamiento con el presidente Morales.