Libre la autoridad indígena del ayllu que linchó a 4 policías

Proceso: Cerca de la casa de Valerio Mamani se hallaron dos fábricas de cocaína y droga líquida, que fue incautada. Matanza: fiscal potosino va a Uncía. ONU condenó el crimen.

image Marchas de familiares de los linchados, el lunes en Oruro. – Agencias (Los Tiempos)

Potosí / El Potosí.- Valerio Mamani Huara Huara, jilanck’o (autoridad originaria) de la comunidad laime Pairumani, en el norte potosino, quien fue detenido por tráfico de drogas, salió en libertad condicional por orden judicial.



El fiscal antinarcóticos Marco Rivadeneira informó a El Potosí que la decisión fue asumida a pesar de que se opuso el Ministerio Público por los antecedentes del caso.

“En la audiencia, el juez cautelar dispuso la libertad del imputado no obstante que el Ministerio Público se opuso a la misma, después de que observamos la documentación que presentaron”.

El Fiscal recordó que, el sábado 22 de mayo, el personal antinarcóticos de la capital potosina dio con dos fábricas de droga en la comunidad Pairumani del ayllu Laime. A raíz de esa situación, la autoridad originaria fue detenida porque se encontró droga líquida cerca de su casa.

“A una distancia considerable del domicilio de este señor (Valerio Mamani Huara Huara) se encontró 20 litros de droga líquida, eso hace presumir que el propietario se estaría dedicando a la fabricación de la droga”.

Al día siguiente, en el mismo ayllu, cuatro policías fueron detenidos por presunta extorsión a conductores de vehículos “chutos”. Según la Fiscalía de Oruro, tres de los uniformados fueron linchados el 25 de mayo y uno el domingo 30, mientras se negociaba su liberación. Empero, según el Gobierno, todos perecieron el 25 de mayo, por lo que no se podía rescatarlos.

El ex comandante departamental de la Policía de Oruro, coronel Mario Hinojosa, relacionó el linchamiento de los efectivos con esa detención.

La autoridad campesina tendrá que presentarse de manera semanal en el asiento fiscal de Uncía y mensual en el Ministerio Público de la capital potosina, ello como parte de las medidas sustitutivas a la detención preventiva emitida hace 14 días.

Los ayllus negaron en su momento que la detención del jilanck’o haya sido la causa de la retención y posterior asesinato de los efectivos policiales. Las investigaciones sobre ese hecho están en curso y la Fiscalía dice que ya identificó a algunos responsables. La Prensa.

Matanza: fiscal potosino va a Uncía

LA ONU CONDENÓ EL CRIMEN

Los Tiempos

La Paz |Anf.- Una comisión integrada por ocho investigadores, presididos por el fiscal de Distrito de Potosí, Sandro Fuertes, se trasladará mañana a Llallagua para iniciar la investigación del linchamiento de cuatro policías el 23 de mayo pasado en los ayllus de Saca Saca y Cala Cala de Uncía, informó ayer el director Nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), Óscar Muñoz.

Muñoz informó que el fiscal de Distrito de Potosí, junto a dos fiscales y un equipo de seis investigadores, realizará un trabajo técnico en Uncía luego de llegar a un acuerdo con las autoridades originarias de Saca Saca, quienes les permitirán el ingreso sin que premie actividad hostil.

«Hasta que se resuelva este tema y se dé con los autores, ellos permanecerán el tiempo necesario en la zona del conflicto y estén aprehendidos quienes tengan que estar aprehendidos. El fiscal de Distrito ha hecho la reunión, ya tiene tema avanzado con las autoridades del sector para que no exista ese tipo de recibimiento hostil», dijo.

Por su parte, el diputado de Convergencia Nacional Franz Choque alertó a la población orureña de una aparente manipulación por parte del fiscal de Distrito potosino, que empezó a hablar de un supuesto enfrentamiento entre los cuatro victimados policías con un grupo de «chuteros» (gente que se dedica a internar al país vehículos indocumentados).

Muñoz informó que el Fiscal ya hizo una reunión con autoridades de los ayllus para que se den las garantías necesarias para que los investigadores cumplan su misión.

Considera necesario que la opinión pública esté informada sobre la posible intencionalidad del Gobierno de direccionar las circunstancias de los hechos, al considerar que existe el riesgo de que el Ministerio Público se invente un enfrentamiento entre los cuatro policías que estaban fuera de su jurisdicción con grupos de contrabandistas.

«Donde los comunarios del norte de Potosí queden como angelitos y con eso quede en la impunidad la muerte de los uniformados y se evite los procesos penales contra el ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, viceministro Gustavo Torrico, comandante General de la Policía, Oscar Nina y representantes del Ministerio Público», dijo.

En tanto, el diputado de Convergencia Nacional Luis Felipe Dorado expresó sus dudas por el ingreso del fiscal Santos con sólo tres investigadores. «¿Qué están tramando ahora? ¿Será que han llegado a un acuerdo sucio con los comunarios para ingresar y maquinar una nueva hipótesis? ¿Para hacernos creer que los policías que murieron eran delincuentes y murieron por la mano de los contrabandistas?», cuestionó el diputado.

El comandante general de la Policía, Oscar Nina, aseguró ayer el esclarecimiento a fondo de lo ocurrido en los ayllus de Uncía el mes pasado.

15 linchamientos en 2010

La Oficina en Bolivia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh-Bolivia) condena el linchamiento de cuatro policías acaecido en el municipio de Uncía, departamento de Potosí, hecho ante el que instó a las autoridades competentes a investigar “pronta y exhaustivamente” para dar con los responsables.

El organismo internacional resaltó mediante una nota de prensa que el número de linchamientos ha venido progresivamente incrementándose en el país. En 2009, según datos de prensa, ocurrieron 56 casos de intento de linchamiento y 15 ejecuciones. En lo que va de este año, dan cuenta de que en los 36 casos reportados fueron asesinadas 15 personas, incluyendo a una mujer. La mayoría de estos casos se produjeron en un medio urbano, y las investigaciones no han logrado esclarecer los hechos ni identificar a los responsables.