Linchador de policías en Uncía salió de la cárcel

Hilarión Escapa Gallego, acusado de estar involucrado en el linchamiento de los 4 policías en los ayllus de Cala Cala y Saca Saca, municipio de Uncía, salió de la cárcel de Cantumarca ayer.

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Hilarión Escapa Gallego salió custodiado del Poder Judicial



El Potosí, Marbin Valda Angulo

Acusado por muerte de 4 policías salió de la cárcel

HILARIÓN ESCAPA ESTÁ CON DETENCIÓN DOMICILIARIA

La audiencia de cesación de detención preventiva se desarrolló ayer por la tarde en el Juzgado Cautelar Tercero en lo Penal que es presidido por el juez Edgar Jallaza.

El imputado por la presunta comisión de los delitos de asesinato, robo agravado y asociación delictuosa fue detenido en el penal el 4 de septiembre de 2010.

Si bien salió de la cárcel, el juez ordenó la detención domiciliaria de Escapa Gallego a cumplirse en un inmueble de esta capital con la finalidad de garantizar el proceso de investigación.

La aprehensión contra el acusado se debió porque existen indicios que hacen presumir que es uno de los autores del linchamiento de los policías de Diprove de Oruro, según el cuaderno de investigación del Ministerio Público.

El suboficial Nelson Alcócer Casano, el cabo Rubén Cruz Aruquipa, el cabo Esteban Alave Arias y el policía Miguel Ramos Palluni, que investigaban el robo de dos vagonetas de la ciudad de Oruro, fueron tomados como rehenes y luego asesinados.

Tras los hechos de sangre se asumió la determinación de iniciar una investigación para esclarecer el ajusticiamiento ya la fecha existen más nombres y apellidos de quienes probablemente hubieran participado en el asesinato de los policías que ocurrió un 22 de mayo de 2010.

Escapa Gallego, al principio de su detención, se acogió a su derecho al silencio, pero cuando la prensa le consultó si había participado en el secuestro y asesinato de los uniformados repitió varias veces que no sabía nada.

Un operativo policial desarrollado en la población de Catavi (cerca de Llallagua) permitió aprehender a Escapa Gallego, que se dirigía a Uncía.

Tras ser detenido el acusado aseguró no saber nada de la muerte de los cuatro policías. “No sé nada. ¿Para qué voy a hablar? Sin motivo me han traído. No sé nada, no tengo nada”, dijo en entonces.

“Yo estaba yendo a Uncía. ‘En ahí’ me han agarrado. Estaba yendo al hospital, soy operado”, señaló. Dijo que es trabajador minero desde hace 25 años y tiene cinco hijos; uno falleció presuntamente estrangulado y su cuerpo fue echado a un barranco precisamente el 22 de mayo, día en el que los cuatro policías fueron capturados por los comunarios en Uncía.

Situación jurídica de Muruchi

Sin embargo, el mismo juez cautelar negó cesación de detención preventiva de Filomena Muruchi. La audiencia se realizó horas antes del segundo y fue ahí donde se analizó su situación jurídica.

Si bien se eliminó en parte los riesgos procesales presentando la documentación respectiva para que cese la detención preventiva adjuntando el lugar donde vive (Uncía), una familia constituida y no tener antecedentes penales, pero se mantiene el peligro de obstaculización.

“No se ha desvirtuado el peligro de obstaculización”, dijo el juez Edgar Jallaza al sostener que aún prima en esa región el “pacto del silencio”. A la fecha se desconoce el paradero de las armas y vehículos de los policías.

Sin embargo, fue claro y preciso al señalar que probablemente no haya participado de los hechos luctuosos, pero faltan otros elementos de juicio para cesar su detención preventiva.

Aclaró que en ningún momento se violó la presunción de inocencia pero se decidió mantener vigente la detención preventiva en el recinto penitenciario de Cantumarca de esta ciudad.

Anticipo de prueba

El Ministerio Público solicitó una audiencia de anticipo con la finalidad de esclarecer y seguir adjuntando nombres y apellidos de otras personas que probablemente hayan participado de los hechos violentos.

Una adolescente de 17 años declaró ante el juez cautelar, Edgar Jallaza. En dicha audiencia narró cómo ocurrieron los hechos horrendos que dejó estupefactos a más de uno.

La muchacha levantó algunos nombres y apellidos de quienes tendrían las armas que se habría arrebatado a los policías e incluso dijo que un vehículo oficial estaba esa noche que ocurrió el linchamiento de los policías.

No obstante, por el delicado tema se pidió prudencia porque se trata de una testigo de cargo que puede ayudar a esclarecer la verdad de los hechos que ocurrieron en los dos ayllus del municipio de Uncía.