Cae un clan familiar que usaba a niños para vender droga en sobres

Cochabamba. Tres adultos y un niño de 13 años fueron aprehendidos. En una casa de Ticti Norte hallaron droga, dinero e instrumentos para el pesaje y envasado de la cocaína.

imageLa venta de sobres con cocaína es cada vez más común en Cochabamba. archivo

Una denuncia y un seguimiento de varios meses permitió a las autoridades policiales y fiscales aprehender a un clan familiar que se dedicaba al microtráfico o venta de droga en sobres en la zona norte de Cochabamba. Los criminales utilizaban a niños para ofertar la sustancia ilícita a su clientela, que en su mayoría está formada por jóvenes de esta ciudad.



Para evidenciar la denuncia se recurrió a cámaras privadas y de televisión que de manera encubierta fueron apostadas en diferentes esquinas del sector de Ticti Norte, para captar las escenas de la transacción ilegal.

Las imágenes muestran lo que parece un encuentro casual de jóvenes en la calle, pero que en realidad es el momento en que un “amigo” nexo” le presenta al vendedor (un niño de 13 años) a otro joven y luego de fingir que se conocen, proceden al intercambio. Un sobre con cocaína por un billete de bolivianos 10.

La fiscal antidrogas Lorena Meleán informó que luego de aprehender a los comercializadores, allanaron la vivienda del clan situada a cuatro cuadras de la Comuna Tunari. Allí encontraron todos los elementos que prueban el delito. “Hemos hallado la droga en sobres, la cucharilla para medir la cantidad de sustancia que debía ir en cada sobre, dinero”, dijo.

Tres adultos y un menor de edad fueron aprehendidos. Representantes de la Defensoría de la Niñez y la Adolescencia participaron del operativo para garantizar que los derechos del niño sean respetados.

Meleán explicó que el trabajo investigativo comenzó hace un tiempo, luego que una denuncia sobre el uso de menores en la venta de droga en Ticti Norte llegó a las autoridades. Hace dos meses el padre de la familia fue aprehendido. En el clan están, presuntamente involucrados, tíos, primos, sobrinos e hijos.

Para acceder a la droga, los contactos se hacían vía telefónica. Un grupo de Inteligencia de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) efectuó el seguimiento y comprobó que las transacciones se hacían a plena luz del día. En las habitaciones allanadas se verificó que cumplían diversas actividades: el molido de la droga, el pesaje y el envasado. La hipótesis que los investigadores tienen es que los criminales captaban niños en el barrio para asegurar la venta de la droga sin levantar sospechas.

Por: Darynka Sánchez A. OPINIÓN