Cantinfleando sobre el gasolinazo

Que Evo cantinflea sobre esto y aquello no es novedad, entendido el verbo cantinflear por “hablar de forma disparatada e incongruente…”, como señala el Diccionario de la Real Academia Española (RAE), que ya admite el término en sus páginas.De forma sobrada vimos este fenómeno en la Cumbre de Tiquipaya y en varios encuentros internacionales, pero ahora la cantinfleada presidencial se produce con un agravante: ya no se trata de la mera vergüenza nacional ocasionada por los dichos del mandatario cocalero, sino de efectos inflacionarios muy concretos desatados por sus declaraciones.En efecto, el anuncio de Evo sobre la inclusión del “gasolinazo” entre los temas a debatir en el “diálogo nacional” -que el gobierno prepara para diciembre con sus organizaciones sociales afines- detonó las expectativas inflacionarias, al activar la memoria colectiva de lo sucedido en los mercados populares tras el incremento en el precio de los combustibles decretado a fines del año pasado.Ya se calcula que la ligereza en las declaraciones presidenciales podría provocar que la inflación sobrepase el significativo límite del 10%. Entonces viene la segunda fase de la cantinfleada, tratando de afirmar que no se ha dicho lo que se dijo, sino todo lo contrario, desmentidos que a esta altura del partido, con un gobierno de credibilidad cero, no hacen más que confirmar las sospechas instaladas.Qué mejor muestra de ello que esta frase del increíble Ministro de Desinformación, que bien podría ser recogida junto a muchas otras en un hipotético libro titulado Caneleadas: “Algunos medios han hablado, lamentablemente, interpretando antojadizamente un gasolinazo en diciembre (…) Nuestra obligación es informar de manera muy sincera, transparente. No tengo nada que ocultar. Eso es lo que ha dicho el presidente sobre este tema y nosotros entendemos que el presidente Evo Morales, en diciembre próximo, va a informar de lo que significa la subvención de los carburantes, del costo que significa esa subvención, de su aumento”.El modelo evoimportadorSi la inflación preocupa, también lo hace el incremento exponencial en las importaciones. Según datos presentados por Wilfredo Rojo, presidente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), hasta septiembre de este año ya se había superado en 29 millones de dólares lo importado en el 2010, llegando a la cifra record de 5.416 millones de dólares.Cuidado que acabemos como Venezuela, exportando sólo hidrocarburos e importando casi todo lo demás, incluyendo los alimentos…[email protected]