Caso Pinto: El Gobierno boliviano no hace lo que dice, afirma abogado brasileño

El abogado brasileño, Fernando Tibúrcio Peña, es optimista en cuanto a una solución de su defendido, el senador Róger Pinto. Sin embargo, lamenta el doble discurso del gobierno boliviano.

‘El Gobierno no hace lo que dice’

image Entrevista: Fernando Tibúrcio, Abogado de Róger Pinto.



EL DÍA, Santa Cruz

¿Qué opina sobre el incidente del avión de Evo en Europa después de lo ocurrido con el avión  del ministro de Defensa, Celso Amorim, en Bolivia?

El discurso realizado por Evo Morales en el caso del cierre del espacio aéreo europeo acabó vacío. En Brasil existe una expresión popular que dice “haga lo que yo digo, no haga lo que yo hago”. El Gobierno boliviano mostró que dice una cosa y hace otra bien diferente. Sin menospreciar la circunstancia de que la tentativa, por parte del embajador español en Viena, de revisar el avión en que viajaba Evo Morales haya sido un atentado a la soberanía da Bolivia, existe una enorme contradicción en el hecho de que el Gobierno boliviano ha hecho el mismo tipo de cosa en el caso do ministro de Defensa brasileño. Imputo la responsabilidad al Gobierno boliviano, porque es una ilusión, para no decir ingenuidad, imaginar que aviones de la Fuerza Aérea Brasileña fueran inspeccionados en por lo menos tres ocasiones sin que esas inspecciones fueran de conocimiento de altas autoridades bolivianas.

En Bolivia varios políticos, incluido el presidente, hicieron varias declaraciones para explicar el incidente con el avión de Amorim, ¿fueron suficientes para el gobierno de Brasil?

No, no fueron suficientes. La respuesta tiene que ser dada con acciones, no con palabras. De nada sirve pedir disculpas a Brasil y no permitir la salida del territorio boliviano del senador Róger Pinto. Además de eso, Evo se sobrepasó en un discurso basado en amenazas. Basta ver que recientemente declaró a una emisora de radio local que funcionarios de la Embajada de Brasil en La Paz creen más en el senador Pinto que en el Gobierno boliviano y que eso iría a evaluar después. Estaba obviamente refiriéndose al embajador Marcel Biato, injustamente demonizado por el Gobierno boliviano. Otra cosa que no debemos olvidar es que incluso en 2011, año en que las revisiones de aviones brasileños fueron admitidos, había una clara percepción de parte del Gobierno boliviano de que Róger Pinto podría en cualquier momento recurrir al asilo diplomático. Una de las hipótesis posibles era la de que el asilo le fuese otorgado a bordo de una aeronave militar. Esa particularidad tira por tierra las negativas del Gobierno boliviano de que el objetivo no era encontrar al senador.

¿Por qué cree que el gobierno brasileño no presiona al gobierno boliviano? ¿Cómo son las relaciones actualmente entre ambos países?

Brasil podría presionar a Bolivia, por ejemplo, generando una objeción a su ingreso como miembro pleno del Mercosur. O suspendiendo las negociaciones del Corredor Bioceánico, un asunto que interesa mucho más a Bolivia. No lo hace porque la diplomacia brasileña adopta en relación a Bolivia una postura fraternal. Es como si Bolivia fuese nuestro hermano menor, nuestro hermano más débil. Esto provoca que ciertos comportamientos arbitrarios del Gobierno boliviano en relación al Gobierno brasileño acaben siendo relevados. Hay otros casos en que autoridades brasileñas de primera línea fueron sometidas a restricciones en Bolivia y que no merecieran una nota de protesta por parte del Gobierno brasileño. Actualmente, las relaciones entre los dos países pasan por un momento muy delicado. Casos como el de Róger Pinto, que serían bastante simples de resolver, causan enormes perjuicios a las relaciones bilaterales.

Algunos parlamentarios brasileños han reclamado públicamente contra su gobierno, por la retardación en resolver el caso del senador Pinto, ¿están ellos haciendo alguna interpelación ante el gobierno brasileño?

La Comisión de Relaciones Exteriores de nuestro Senado podrá -y creo que lo hará- retardar la concesión del beneplácito para que el embajador Marcel Biato pueda dejar Bolivia, así como puede dificultar la venida del nuevo embajador de Brasil que asumirá el puesto en La Paz. Varios formadores de opinión en el Congreso Nacional brasileño han declarado públicamente su insatisfacción con relación a la demora para encontrar una solución para el caso del senador Róger Pinto.

¿Se ha comunicado con el embajador de Bolivia en Brasil, Jerjes Justiniano?

No. No veo cómo el embajador Justiniano puede contribuir positivamente en el caso del senador Róger Pinto. Además de eso, pienso que el embajador debe estar muy ocupado con la triste situación de millares de inmigrantes bolivianos en Brasil, con las duras condiciones de trabajo y violencia a que son sometidos. Y también, obviamente, bastante ocupado en explicar las constantes agresiones del Gobierno boliviano a su vecino.

¿Cuál es la situación legal actual del senador Róger Pinto?

Hoy, si el senador Róger Pinto simplemente saliera a pie por la puerta de la Embajada de Brasil, hay motivos más que suficientes para creer que sería inmediatamente preso, como consecuencia de las más de dos decenas de procesos que fueron abiertos contra él. Aunque la Constitución boliviana prohíba la prisión preventiva de parlamentarios, excepto los casos de flagrante delito, el senador podría ser detenido en prisión domiciliaria, algo que ya aconteció en el pasado. Es preciso recordar que el senador viene sufriendo una atroz persecución política y hay un consenso en la comunidad internacional de que a Bolivia todavía está muy lejos de tener un Poder Judicial independiente, inmune a las influencias de Gobierno. Por otro lado, el senador cuenta con la protección legal, reconocida por el derecho internacional y refrendada por la propia Bolivia en la última reunión de la cúpula del Mercosur, del asilo que le fue concedido por el Estado brasileño.

¿Qué tan optimista es respecto a una solución a este conflicto?

Estoy muy optimista con una rápida solución para el caso del senador Róger Pinto. No solo porque el Hábeas Corpus extraterritorial que presentamos en su favor será muy probablemente juzgado en agosto por el Tribunal Supremo Federal brasileño, más porque la presión internacional se está tornando fortísima. Hoy mismo el caso de senador Róger Pinto fue destacado en uno de los principales medios de prensa mundial, la revista The Economist. Cuando iniciamos nuestro trabajo, prevalecía la visión propagada por el oficialismo: la de que el senador era un pastor acusado de crímenes de corrupción, homicidio, entre otras acusaciones absurdas. Hoy prevalece la visión de que el senador fue el político que tuvo el coraje de denunciar el vínculo con el narcotráfico de personas que frecuentan el Palacio Quemado.

El Perfil

Fernando Tibúrcio Peña

Abogado

Ciudad Natal:

México DF

Edad:

46 años

Estado civil:

Casado (Miriam)

Hijos:

2 hijos (Juliana y Rafaela)

Trayectoria:

Actuó en casos de gran persecución en Brasil.

Coordinador de campaña para la reelección del presidente Luiz Inacio “Lula” da Silva, en el año 2006.

Actuó como defensor pro bono en causas de derechos humanos y medio ambiente.

Escribió artículos sobre la defensa de los DDHH y el medio ambiente.