Caen colombianos acusados de estar ligados a asesinatos

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Al parecer integraban una organización de narcos. Uno es extraditable. Hay nombres de cabecillas y de sicarios, pero se encuentran fuera de nuestro país.

on la captura de cinco ciudadanos colombianos, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) afirmó haber hallado el hilo conductor para esclarecer los asesinatos a sangre fría de los también colombianos Máximo Bolaños Aguilar (49) y Diego Fernando Marcelo Maitaburi (29), muertos a tiros en octubre en lugares públicos de la capital cruceña.



Según la información oficial, los detenidos forman parte de una intrincada organización criminal dedicada a actividades de narcotráfico en el país, al parecer, dirigida desde el exterior por narcocapitalistas que supuestamente bajaron el pulgar a seis miembros del grupo y contrataron a sicarios profesionales para matarlos. Los investigadores deducen que entre esos seis estaban Bolaños y Marcelo Maitaburi, y se concluye que cuatro están en la mira.

Arresto clave

Personal de Migración arrestó el martes, en Puerto Suárez, al colombiano Bairo José Ávila Vaca (41), con pedido de extradición en Perú por delitos relacionados con narcotráfico. Este fue remitido a Interpol, que, a su vez, derivó al sujeto a la Felcc, donde reveló nombres de miembros de la organización y la ubicación de un laboratorio de purificación de cocaína, situado en inmediaciones de Zanja Honda, provincia Cordillera.

Agentes de la Felcc, por su parte, aprehendieron, en diferentes condominios de la ciudad, a Nelson O.M. (45), Carlos Y.G. (37), Luis Z.G.S. (35) y Leonardo A.P.M. (34). Todos fueron remitidos a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico, junto con dos mujeres bolivianas, luego de la intervención en el laboratorio de Zanja Honda.

“Ellos son parte de la organización relacionada con actividades de narcotráfico y con los asesinatos ocurridos últimamente en Santa Cruz. Cada cual cumple un rol”, dijo Johnny Requena, jefe de la Felcc.

A buen recaudo

A decir de Requena, los cabecillas que ordenaron las ejecuciones están identificados, lo mismo que los sicarios, pero viven fuera de Bolivia. “Los sicarios vienen con los pasajes comprados, cumplen (matan) y se van para eludir el control de la Policía”, aseguró Requena.

En la Fiscalía señalaron que solo uno de los cinco colombianos arrestados irá ante un juez cautelar, pues no hay indicios contra los demás

Fuente: Red Uno, El Deber