Acción. Para enseñar los valores es necesario estar consciente de que son vitales para formar y consolidar la superación de una persona, una familia o una nación
Oswaldo Ramos Astibena – [email protected]
Reza un dicho: la mejor herencia para los hijos es una buena educación. “Eso es algo incontrovertible, puesto que las pertenencias materiales solo enaltecen a la persona por el poder económico, y no así por sus valores morales y espirituales que deben caracterizar a todo ser humano”, señala el profesor Lorenzo Menacho.
Existen valores familiares, sociales y culturales, materiales y espirituales, además de los éticos y morales. Estos últimos, afirma el maestro Ricardo Gutiérrez, son los que se consideran indispensables para la correcta convivencia de la gente en la sociedad.
Los tres fundamentales
La doctora Dolly Montaño y los docentes Menacho y Gutiérrez coinciden en señalar como tres valores fundamentales a los siguientes:
1.- La responsabilidad, que tiene que ver con la confianza de que nuestros hijos sabrán asumir algunas tareas y las cumplirán. Tiene que ver con la conciencia de que los actos o el incumplimiento de los mismos arrastra consecuencias para otras personas o para nuestro propio hijo.
2.- La honestidad, que debe ser cimentada con el ejemplo. Los mayores muchas veces mienten hasta de manera ligera como cuando dicen: «Decile a esa señora que no estoy», solo porque no quieren hablar por teléfono con alguien, o mienten delante de los hijos sin el menor remordimiento. Y a veces hasta se felicitan por la estupenda mentira que se inventaron. Hay que enseñar a los hijos que la mentira tiene patas cortas.
3.- El respeto, que viene a ser la consideración de que alguien o incluso algo tiene un valor por sí mismo y se establece como reciprocidad: respeto mutuo, reconocimiento mutuo. El respeto a la vida, a sí mismo y a los demás. Es algo grande.
Otros
Dolly Montaño considera que de la educación de los valores éticos y morales depende el resto. Es que para superarse, agrega, nadie puede prescindir del respeto, “que empieza cuando nos dirigimos a nuestros hijos correctamente, de la misma manera que esperamos que ellos se dirijan a los demás”. También está la cortesía y la tolerancia.
Y el amor
Julio César Chávez, padre de familia, considera que estos tres valores se sustentan en algo más grande, el paraguas del cual nadie puede prescindir y que está por encima de todo, el amor
Complementos necesarios en la orientación a los hijos
Hay que tener consideración. Esto significa saber renunciar a los propios intereses en beneficio de los demás. A ello se agrega la tolerancia, que es la aceptación y el respeto hacia la gente que es diferente.
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Primer paso
Aceptar la importancia de vivir los valores. aquí hay dos clases, los que uno ya aprendió y lueglo los que se busca conseguir
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Plan maestro consiste en fijarse una meta diaria. por ejemplo, fortalecer el lazo de amistad con alguien, llamándolo para saludarlo. y así otras más
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Conducta
Con los valores aportamos a superar las diferencias, buscar la igualdad, respetar la intimidad, y también al trato con ternura
Fuente: El Deber.