El presidente le pide a la población dar una buena acogida a los visitantes. Si está por las calles o desde una ventana, alzar la mano o dar un bocinazo como gesto de bienvenida. Si Bolivia pasa la prueba, dice, ganará confianza para otros eventos internacionales»Se usará el Túpac Katari para llevarla señal hasta África»Será oportuno para proyectar a Bolivia El presidente Evo Morales recibió a EL DEBER en El Trompillo, un aeropuerto que ahora tiene estatus internacional. Confiesa que no se equivocó al elegir a Santa Cruz como sede Cecilia Dorado N. –[email protected]De camisa y pantalón claro, y con un semblante relajado a pesar de su apretada agenda, el presidente de Bolivia, Evo Morales, no oculta su entusiasmo al ver las obras para cumbre del G-77 + China en Santa Cruz de la Sierra. En 2008, cuando el Gobierno instaló el discurso del supuesto golpe de Estado alentado desde el oriente, tal vez era impensable este nuevo escenario en el que el propio presidente dice: ‘La cumbre nos unió’.A una semana del evento internacional, ¿cómo evalúa los preparativos?Muy alentado y contento con el trabajo conjunto que hicimos con los alcaldes, especialmente con los de Santa Cruz y de Warnes. A esta altura, todo lo que nos hemos propuesto ejecutar, algunas obras de emergencia, casi todas han sido concluidas pese al tiempo y a la lluvia, por eso es una nueva experiencia para mí que cuando se trabaja de forma conjunta hay resultados en bien de Santa Cruz.¿Y en tiempo récord?Exactamente, es impresionante cómo hemos culminado todas las obras y ahora acompañamos al alcalde (Percy Fernández) y al gobernador (Rubén Costas) en las inauguraciones.¿Qué significa la cumbre?Primero es una experiencia para todo el pueblo boliviano y para sus autoridades, sean departamentales, municipales o nacionales. Segundo, en esa responsabilidad nuestra tarea es demostrar una buena recepción, atención y un buen evento, y ahí tampoco puedo quejarme de los movimientos sociales, de los empresarios, prácticamente casi todos. Lamento mucho al escuchar a pequeños grupos, a un sector de gremiales, tal vez a algún sector de los más conocidos como separatistas… mi pedido es que al margen de las diferencias que tengamos, es el mejor momento, un momento histórico para demostrar que esto es Santa Cruz, que esto es Bolivia. Ese es el deseo.Ya estoy más de ocho años como presidente y cuando hay cumbres de jefes de Estado en algún país o región todo se moviliza y esa es nuestra responsabilidad. Quienes van a visitarnos, presidentes, vicepresidentes, cancilleres, embajadores, ministros y prensa internacional, si hay una buena atención y si demostramos que todos estamos unidos, nunca se van a olvidar en su vida de la atención que recibieron en Bolivia.Santa Cruz es conocido como un departamento hospitalario, este es el mejor momento para demostrar que somos hospitalarios, generosos.¿Será Santa Cruz el rostro de Bolivia durante esos días?Santa Cruz representará a toda Bolivia, tiene que demostrar esa cara de los bolivianos. Por supuesto que habrá autoridades nacionales, de otros departamentos, delegaciones de otras regiones y algunos quieren venir a acompañar (la cumbre) por encima de sus autoridades, por eso tenemos concentraciones, ferias para exponer sus productos. La última vez que visité San Matías vi el toro al espiedo (ríe), no sé si es, pero es un ganado sin patas, cabeza ni tripas que coció en 18 horas. El alcalde no es de mi partido, pero trabajamos muy bien y le sugerí si puede traer esto, me dijo que encantado, ojalá alcance a hacerlo.¿No se equivocó al elegir Santa Cruz como sede de este evento?Decidí (eso), pero tenía mucho miedo. Miedo de la hotelería, de las áreas de estacionamiento en los aeropuertos, debo reconocer que el empresariado privado de Santa Cruz, mediante Gabriel Dabdoub, me dijo: ‘Presi, métalo’. Y eso se ha traducido en hotelería y en otras obras, esas expresiones alientan a uno y no nos hemos equivocado, ahora todos trabajamos de manera conjunta.¿Y continuará ese trabajo conjunto después de la cumbre?Quisiera eso, pese a que es año electoral y, al margen de nuestras posiciones ideológicas, partidarias, es un derecho constitucional trabajar juntos por el departamento. En algunos temas nos juntamos, nos acompañamos en las inauguraciones y las obras quedan para el pueblo, no es para el presidente, para el gobernador ni para el alcalde.Las autoridades elegidas con el voto somos pasajeras, tenemos el tiempo limitado, prestado, entonces quisiéramos seguir trabajando con el gobernador, con el alcalde. Ese es el gran resultado, con motivo del G-77, la cumbre en sus 50 años, todos movilizados y después todas las obras quedan para el departamento, qué mejor que seguir avanzando en otros proyectos más grandes para el departamento de Santa Cruz, el más poblado.¿Es un paso más en la relación que construye con Santa Cruz?Creo que el G-77 nos ha unido a los movimientos sociales, empresarios y autoridades.¿Cuál será su principal planteamiento en el marco de la cumbre?La meta fundamental de esta cumbre es qué hacer después de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, ese es el debate profundo y por principio vamos a achicar las diferencias económicas, a reducir la pobreza, ver el sistema financiero del mundo, cómo lograr un mundo con justicia social, con igualdad, con dignidad, es un debate no solo social sino también político, cómo profundizar el tema de la Madre Tierra y los valores éticos del político, porque la gente cuestiona, por ejemplo, esa soberbia del político; entonces, cómo podemos cambiar eso, cómo plantearnos que no se trata de ostentar el poder político para abusar, sino cómo aprovechar ese mandato tan noble y sagrado sirviendo al pueblo, es es nuestra experiencia.¿Hay alguna medida en particular que usted quisiera que se viabilice en esta cumbre, por ejemplo, para erradicar la pobreza?Podemos erradicar la pobreza teniendo plata. Nuestra experiencia es que los recursos naturales sean del pueblo pero bajo la administración del Estado. He acompañado al alcalde y al gobernador a entregar motocicletas, más cámaras de vigilancia, equipos de comunicación y en los próximos días habrá otras 50 camionetas, ya tenemos plata, no estamos como antes gracias a la nacionalización.La otra experiencia que tenemos es que la riqueza se ‘socializa’, se democratiza y no se privatiza ni se exporta. Además, que los servicios básicos pueden ser un derecho humano, es una nueva política que hicimos aprobar en las Naciones Unidas y cada Estado tiene la obligación de implementar esta nueva política, ese es el gran deseo que tenemos.‘No maritizar la cumbre’Bolivia ha sido uno de los que más ha hecho gestiones a favor de los países sin litoral dentro del G-77, ¿cómo ve el tema del mar y si se lo va a plantear en esta cumbre?Quiero ser muy sincero, el tema del mar está en La Haya, quiero decirles, que al margen de la responsabilidad que tenemos de explicar (el tema) a los distintos países, mi pedido -con las disculpas al pueblo boliviano- es que no queremos ‘maritizar’ el G-77, porque si empieza una chispa, apoya el pueblo, apoyan a Chile y esa puede ser una discordia. Yo pido, por esta vez, no ‘maritizar’ eso porque somos anfitriones, puede ser (visto) como una maniobra, el anfitrión aprovechando eso.Pero se presentará un libro…Otra cosa son unos documentos que van circulando en todo el mundo, se va a (hacer) circular, pero en el debate mismo no porque siento que es importante (no maritizar) ya que somos anfitriones. Si no viene la presidenta (Michelle Bachelet), habrá una delegación, pero mi gran deseo es que nos visite la presidenta, siempre lo ha hecho en su primera gestión.El nuevo cónsul de Chile en Bolivia ha dicho que Bachelet no podrá venir.Puede haber sorpresas, tengo mucha esperanza en que nos va a visitar, pero también hay que tener mucha responsabilidad como presidente. En las distintas cumbres de jefes de Estado, la presidenta de Chile siempre me ha acompañado, nosotros también la hemos acompañado. Incluso cuando empezó el golpe de Estado en 2008, ella con (Hugo) Chávez y con Lula (da Silva), convocó una reunión de emergencia de Unasur en La Moneda, en Santiago, y ahí dijeron: ‘Pese a nuestras diferencias vamos a defender la democracia, no a van a venir de arriba a juzgarnos aquí’. Esta decisión permitió defender la democracia, esa es la presidenta de Chile y por eso tengo mucha eperanza que nos va a compañar en la cumbre.El Mundial en BrasilUsted estará en la apertura del Mundial ¿y luego viene a la cumbre?Tengo una invitación de la presidenta de Brasil, al margen de ello me encanta el deporte y está tan cerca como participar en la inauguración. El 11 estaré temprano a los centros mineros de Oruro, en Santa Cruz tengo varias actividades, en la noche me iré a participar de la inauguración (del Mundial) y regresaré con el secretario general de las NNUU, Ban Ki-moon. Mi gran deseo es llegar a la inauguración de la exposición de productos de los nueve departamentos. Ban Ki-moon me dijo que quiere conocer un día en la vida del presidente, por eso iremos a Concepción, El Torno y Pampa Grande.¿Va a aprovechar el Mundial para convencer a la presidenta Dilma Rousseff de participar en la cumbre?No nos ha confirmado hasta ahora, está invitada, como cualquier presidente, a veces se presentan conflictos, hay que quedarse, pero esperamos contar con la presidenta Dilma.El presidente de China no vendráMe mandó una carta disculpándose porque no va a poder venir, pero que mandará una delegación de alto nivel. Y, según el embajador de China en Bolivia, el presidente no fácilmente manda una carta a otro presidente informando eso. China es una de las potencias más importantes, si no es la primera. Recuerdo que su presidente dijo hace unos dos años en NNUU: ‘Nosotros nos desarrollamos no para dominar al mundo, sino para compartir lo que tenemos’. Me sorprendió ese discurso y el gran deseo que tengo es cómo incorporar al G-77 + China a Rusia, qué bueno sería.¿Por qué sería importante?Es parte de cómo integrarnos, una integración para liberarnos, cooperarnos, pero no una cooperación para dominarnos. Siento que esta integración de países y gobiernos con muchos principios, valores y conciencia social para resolver temas sociales sería importante.¿Y ha hecho usted alguna gestión para la incorporación de ese país?Bueno, como Rusia no es miembro nato del G-77 a ver si mi voz es escuchada mediante este periódico. Ya hay ese debate.El ambiente en Bolivia¿Cómo evalúa usted el ambiente actual del país con miras a la cumbre?Hay mucha expectativa, lo que me ha llamado la atención, al margen de Santa Cruz, en el interior del país es que la gente se siente orgullosa de que ya no somos un pequeño país porque asumimos la responsabilidad de un evento tan importante. La gente se pregunta ¿cómo puedo aportar o acompañar? por eso hemos organizado la concentración del 14 (en el estadio Tahuichi). Yo siento que después del Dakar, el G-77 ha generado ese orgullo sobre estos eventos internacionales.Pero hay algunas protestas.Siempre hay problemas que se presentan, existe uno en El Alto por las tarifas y es un tema netamente municipal, hay otro con un pequeño grupo de lecheros en Cochabamba, hay que debatir, resolver. También la carne, primero fueron las inundaciones y luego el frío que mataron a miles de reses y alguna gente quiere aprovecharse, no es que falte carne. Es obligación de las alcaldías y de todas las autoridades controlar los precios.¿No cree que algo de esto pueda afectar a la cumbre?Dudo, siempre se presentan problemas, eso es normal. Tengo mucha esperanza en que esto salga muy bien, si es así, nos ganaremos confianza para cualquier evento internacional, eso deja movimiento económico y turismo.Mi pedido, al pueblo cruceño en particular, es acompañar la cumbre. Si está por las calles o desde una ventana por donde pasan los presidentes, no cuesta nada saludar o levantar la mano, o si está en su taxi tocar bocina para saludar a las delegaciones. Ni se imaginan cómo gana Santa Cruz y Bolivia por ese levantar de manos o ese bocinazo. Sería un buen gesto humano.Su proyección como líderAsí como se va a mostrar la imagen del país, también se proyectará su figura como líder, ¿qué opina?No estoy mirando el liderazgo, si fuera Evo convertido en ‘ego’ no estuviera convocando al alcalde, a los empresarios, mi experiencia es trabajar de forma conjunta. Ahora, no sé si es malo o bueno, cuando estoy seguro, decido. Cuando no estoy seguro, hago reuniones, consultas y aquí teníamos que asumir de forma conjunta y hemos asumido. Si alguien gana de este evento es el trabajo conjunto: alcaldías, Gobernación, Gobierno nacional y movimientos sociales, sean empresarios, obreros, originarios…¿Con qué países le interesa fortalecer relaciones en el G-77?Con los vecinos, es nuestra obligación. Vamos bien con Brasil y Argentina, queremos mejorar con Perú, queremos recuperar con Chile, tenemos algo con Chile que a veces no nos permite, con Paraguay estamos mejorando. Con Uruguay, mi respeto y admiración para (José) Mujica. Como los pueblos indígenas venimos de la diplomacia de los pueblos, quisiéramos tener relaciones con todo el mundo, incluido Estados Unidos, pero relaciones de respeto y de confianza, no de sometimiento.Declaración final¿Qué sabe sobre la declaración final de la cumbre? ¿Hay consenso?Hace unos tres días nuestro embajador (Sacha Llorentti) nos informó que está muy avanzada, por ahora nosotros estamos más abocados a la organización, pero nos informará para respetar, porque es difícil llegar a consensos.Y ahí debo reconocer que hermanos de Argentina, Brasil y Cuba nos ayudan bastante con su experiencia en cómo llegar a consensos, hay términos en la diplomacia internacional para llegar al consenso, debemos reconocer que no tenemos mucha experiencia de un equipo de expertos en las negociaciones, saludamos todos los esfuerzos que se están haciendo, pero a veces explicar y convencer sobre un deseo, una política o una propuesta social es difícil.Si no hay consenso no habrá declaración final, ¿cree que se logrará?Tengo mucha esperanza, por eso mismo, para buscar consenso vamos a ‘desmaritizar’ la cumbre, que me disculpe el pueblo boliviano, soy sincero, está en juego la imagen del pueblo bolivianoFuente: eldeber.com.bo