Tomasa Yarhui, indígena quechua es abogada y candidata a la Vicepresidencia por el PDC.
Las mujeres tienen espacio sólo por las leyes, no por el Gobierno
Fue líder sindical desde los 12 años. Fue discriminada en su escuela en Sucre por su condición de niña del campo. Pidió a sus padres regresar a su comunidad.
Página Siete / La Paz
Tomasa Yarhui viste una manta bordada y una pollera corta propia de las sucrenses. Ella es la candidata a vicepresidente por el Partido Demócrata Cristiano (PDC), que acompañará a Jorge Tuto Quiroga Ramírez en las elecciones del 12 octubre de este año.
Es la única mujer indígena candidata a la Vicepresidencia.
A sus 12 años se convirtió por primera vez en dirigente. A sus 17 años se consolidó como la primera mujer dirigente campesina de su comunidad. Después perteneció a varias organizaciones, entre ellas la de Bartolina Sisa.
Sobre el juicio por el caso petrocontratos que afronta Jorge Tuto Quiroga, Yarhui cuenta que fue la única abogada que presentó los alegatos de la defensa en idioma quechua, por lo que abogados del Gobierno, que estuvieron en la audiencia, abandonaron la sala por falta de conocimientos en ese idioma originario.
¿En qué circunstancias se inició como dirigente?
Mi profesor me decía «ratona”. Un día le dijo a mi padre: «Esta ratona va a llegar lejos, la tiene que enviar a un colegio de la ciudad”. Entonces, mi padre decide llevarme a Sucre, al igual que a mi hermano.
Ahí, a mis ocho años, comenzó mi martirio porque estaba lejos de mi familia y era discriminada por mi condición de campesina. Recuerdo que yo copiaba la tarea de mis compañeras. El profesor les calificaba con buena nota, pero a mí me ponía una mala nota.
A los 12 años le dije a mi padre: «Ya no aguanto más”. Sentía mucha discriminación, porque mi recreo era tostado de trigo y mis amigas llevaban dinero.
A esa edad retorné feliz a mi comunidad y allá comencé la dirigencia. Mi primer cargo fue secretaria de actas de mi comunidad.
¿Fue complicado ser dirigente a esa corta edad?
Sí, porque el machismo predominaba. Yo les contaba la experiencia que viví en la ciudad y planteaba formas para mejorar nuestros conocimientos. Eso les gustó a los pobladores.
Un día, a mis 13 o 14 años, llegó una ONG a la comunidad. Estuvo un tiempo y le dicen a mi padre: «La tenemos que llevar a una escuela de Sucre para capacitarla, porque tiene grandes aptitudes”.
A los 17 años fui designada como dirigente departamental de la Federación de Campesinos y así progresé como dirigente. En ese entonces, ser dirigente era complicado.
¿Por qué era complicado?
Ahora los dirigentes tienen vehículos de lujo, sedes que están muy bien equipadas, pero la situación de la gente sigue igual. No tiene servicios básicos. Está bien que los dirigentes estén en mejores condiciones, pero la prioridad es la base poblacional.
¿Cómo entró a la vida política?
Antes había buenos dirigentes, como Simón Reyes, que nos enseñaron a luchar verdaderamente. Esas veces era prohibido militar en un partido político. Las organizaciones eran independientes.
En una reunión se dijo que no era suficiente ser dirigente y decidimos entrar en la vida política para solucionar las reivindicaciones sociales. De esa manera llegué a ser la primera concejal de pollera en el municipio de Sucre y así ocupé otros cargos.
En estas elecciones no quería participar, porque descuidé el tema familiar por varios años.
Pero ahora es candidata a la Vicepresidencia…
Las mujeres de Sucre me reclamaron: «Te queremos ver peleando por nosotros”. Todos los partidos, excepto el MAS, que sabe que no concuerdo con sus ideales, me invitaron a ser su candidata, pero yo les dije que no.
Pero por la lealtad y agradecimiento a Tuto me entusiasmó acompañarlo.
Cuando Tuto fue procesado, mucha gente lo dejó solo y yo en mi calidad de abogada me puse a órdenes de él y al día siguiente me llegó una notificación de la Cámara de Senadores por un proceso administrativo.
¿Cómo evalúa el rol de la mujer en la actual coyuntura?
Hoy las mujeres tienen espacio sólo por las leyes, no por iniciativa del Gobierno. La mujer sigue siendo relegada.
La mujer es importante en toda instancia porque es el pilar fundamental de una familia.
Pero también debemos esforzarnos para cambiar y mejorar nuestra situación.
HOJA DE VIDA
Inicios. Nació el 7 de marzo de 1968 en la provincia Oropeza de Chuquisaca.
Carrera. Concluyó su carrera de abogada con honores.
Familia. Casada hace cuatro años. Tiene dos hijos: un varón (25) y una niña (3).