¿Qué provoca el sufrimiento en el cerebro?

El-premio-Nobel-de-este-ano-se-lo-llevaron-los-descubridores-del-GPS-del-cerebroComo dice un proverbio, las raíces de los árboles crecen más durante las tormentas. Esto quiere decir que, en cierta forma, es necesario conocer el sufrimiento para aprender, para crecer como persona, y para sacar provecho de los errores y de los fracasos. Hoy, sin embargo, queremos contarte qué provoca el sufrimiento en el cerebro, para que puedas conocer el asombroso funcionamiento de tu cuerpo. 

El sufrimiento esculpe el cerebro

Todo el mundo conoce esto: experimentar, a lo largo de la vida, un sufrimiento continuo somete al cerebro a profundos cambios que afectan inevitablemente a la personalidad. Se puede pensar, por ejemplo, en los niños, y concretamente en los que han tenido una infancia dolorosa y han sufrido desde jóvenes abusos por parte de los adultos. Los médicos y los psiquiatras dicen que en ciertos casos, el sufrimiento es similar a lo que puede sentir un soldado en campo de batalla.



Un miedo continuo, fuertes dosis de ansiedad y tristeza se experimentan por las personas que atraviesan este tipo de pruebas. Esto se traduce en alteraciones a nivel cerebral y por la liberación de ciertos neurotransmisores. ​Las zonas asociadas con el miedo y con el dolor se ven estimuladas, como la amígdala y el córtex insular. A largo plazo, esta estimulación engendra consecuencias a nivel de la personalidad, falta de confianza, enfado repetido, posibilidad de sufrir depresión, y a veces exceso de violencia.

Evidentemente, cada persona es diferente y no siente de la misma manera, pero existen muchas posibilidades de que estas personas sufran síntomas de los que acabamos de hablar. Podemos imaginar, por ejemplo, una pareja en el seno de la cual se producen violencias conyugales. Este exceso de sufrimiento, a nivel cerebral, provoca cierta fragilidad, de la cual nace el enfado, la frustración o la depresión.

El sufrimiento da lecciones de vida

 

La vida no es un largo río tranquilo, ni una balsa de aceite, tampoco es un camino recto sin obstáculos. Es importante saber que la vida tiene sus momentos felices, de los cuales podemos aprender mucho, pero sin ninguna duda, el sufrimiento es uno de los grandes profesores de la existencia; incluso puede tratarse del mejor.

Según una expresión caricaturesca, el que no ha sufrido no ha vivido. Todo el mundo debe aprender de los errores y de los fracasos. La persona que no aprende de los errores no comprende que la vida es un aprendizaje continuo, la persona que no aprende de los fracasos es incapaz de ir hacia adelante para superarlos y hacerse más fuerte.

El sufrimiento no es algo agradable, pero no debe convertirse en un muro que encierre la vida y que cierre todas las puertas. Conviene no olvidar que la estima personal, la fuerza interior y la voluntad deben ser los motores que alimenten la capacidad para vencer el sufrimiento.

Fuente: www.imujer.com