Esteban Farfán Romero*El miércoles (19/08/15) reapareció el malogrado y farolero exalcalde Carlitos Brú (MAS) con un sainete y armado hasta los dientes, con muchas ganas de atacar y buscar pelea, ostentando su conocida habilidad para las martingalas. Brú escogió Radio Frontera para arrojar lo que tenía contenido, y Juan Carlos Castillo lo entrevistó por el lapso de 1 hora y media. Del frente nadie le respondió, a excepción de una activista de quinta línea.Aparte de quejarse y lagrimear por la herida producto de la derrota electoral, Brú repitió muchas cosas muy conocidas, sin embargo dijo algo nuevo realmente muy grave y delicado. Señaló que está recolectando pruebas sobre un supuesto fraude en las elecciones pasadas. Sugirió que UD-A habría montado un gran fraude en Yacuiba. Decirlo a estas alturas, refleja que busca propósitos no claros, no sólo porque es extemporáneo, sino irresponsable. Es más que evidente que Brú sigue sangrando por la herida y no se resigna que Yacuiba le quitó de cuajo el poder y lo puso en la calle. Este tipo de denuncias tienen un plazo perentorio (preclusión), pasado el mismo, ninguna denuncia tiene efecto. Lo que hace Brú es demagogia pura, y es muy dañino.Con proverbial desparpajo criticó a la actual administración por la falta de plan, por el amiguismo, y la falta de implementación de gestión, lo que es cierto, pero aquí viene el detalle; mirá quién habla. Brú no puede con su enorme soberbia, no aprende, dijo que la famosa frase “cama adentro, patrón encima”, en realidad significa metafóricamente que el patrón no deja descansar al empleado.Las dos gestiones de Brú fueron desastrosas precisamente porque no tuvieron un pinche plan. Todo ha improvisado, fue una gestión desordenada, sin rumbo, en la que ha gobernado el derroche, el despilfarro y la corrupción galopante e impune. La única virtud de Brú fue maquillar la ciudad con placitas y demostrar su culto y pasión por el cemento, todo con sobreprecio. En materia de salud, servicios básicos, desarrollo productivo, seguridad ciudadana tiene una nota de 0. La corrupción salta, donde se mire. Fue la década de la corrupción, la ineficiencia y el despilfarro.Me han enseñado que en política se debe advertir siempre el mensajero y el mensaje. Muchas veces el mensajero es el mensaje en sí mismo. En este caso, Brú es el mensaje, la esencia de la improvisación, del derroche y de la ineficiencia, por lo que cualquier comentario sobre gestión pública queda invalidado. No había día en la que los barrios, comunidades, organizaciones sociales hagan la toma de las oficinas del Gobierno Municipal desnudado la falta de gestión y eficiencia.El exalcalde tuvo muchísimas ventajas para hacer una gestión brillante y muy buena. Tuvo un Concejo Municipal dócil y sumiso que legalizaba todo sin cambiar una coma y en tiempo rápido, incluso aprobaban los proyectos cuestionados por evidentes sobreprecio y corrupción. No tuvo oposición política fuerte desde los partidos, porque no existieron, o de activistas. A los periodistas que tienen mayor rating, los ha comprado con jugosos contratos de publicidad, convirtiéndolos en su caja de resonancia perfecta. Con el único Diario hizo lo mismo, facturando más de Bs. 100.000 por mes, publicando las notas que salían de las oficinas de comunicación como si fueran notas del Diario y tapas obsecuentes a su gestión. Sólo contados líderes de opinión hicieron periodismo independiente cuestionando la pésima gestión.Brú ha contado con la amistad y enorme predisposición del presidente Evo Morales, pero en ningún momento ha aprovechado esta ventaja para hacer gestiones en beneficio del municipio en temas muy importantes como la salud, desarrollo productivo, servicios básicos. Brú se ha sometido sin chistar ante el presidente obedeciendo todas las decisiones de Palacio a cambio de gozar de impunidad, pues desde la amistad con el Morales, fue inmune a las diversas acusaciones de corrupción, más bien en varios casos salió sobreseído. La Fiscalía siempre miró para el otro lado cuando se trataba del exalcalde.Brú ha tenido como ventaja la enorme cantidad de recursos disponibles ascendentes que ha bordeado los Bs. 700 Millones. Antes los alcaldes tenían un presupuesto que no pasaban los Bs. 40 Millones. Si se hace una revisión rápida, se ha despilfarrado los recursos y en la gran mayoría se observa sobreprecio, y en algunos casos proyectos innecesarios. La actual gestión tiene la obligación de presentar un informe completo y detallado sobre esta administración.Brú ha tenido como ventaja a la Asamblea Regional que estuvo controlada por el MAS, además de la Asamblea Departamental. La gobernación estuvo administrada por su nuevo partido, y nunca se ha preocupado por hacer gestiones a esos niveles para encarar los problemas primarios de Yacuiba.El exalcalde no tiene moral, no tiene autoridad para hacer este tipo de comentarios, pues cuando pudo hacer algo en beneficio de su pueblo no quiso hacerlo por favorecerse personalmente. Raya en el cinismo y desvergüenza sus comentarios por lo que ha perdido valor su palabra.La actual administración municipal debe sacudirse de su modorra de una vez y comenzar a encarar con seriedad a través del diseño de políticas, los problemas primarios e históricos heredados que no se han resuelto hasta la fecha. No hay otro camino, que planificando estratégicamente la gestión pública. (Yacuiba 24/08/15).*Periodista, analista político y docente