Al economista le preocupa la inmensa deuda que las empresas chinas han acumulado en un período corto de tiempo. Durante la última década, el endeudamiento del sector privado de China se ha disparado, superando la deuda de EE.UU., recuerda Buiter.
«Creo que las cosas están financieramente fuera de control en China», sostiene el economista. «Hasta que los problemas del sector bancario, el sector financiero, en general, y el sector empresarial sean abordados por el Gobierno, creo que las perspectivas para la reanudación de un crecimiento saludable en China son tenues», advierte.
Más allá de las previsiones pesismistas sobre su futuro, China trabaja para tratar de salvar su economía vendiendo reservas y protegiendo al yuan de una nueva devaluación buscando nuevos caminos para desarrollar la banca privada y abrir más su sector financiero al resto del mundo.
Fuente: ActualidadRT