El uno por ciento


Elio Pedraza Vargas*El señor Ministro de Economía del Estado Plurinacional dijo que solo el uno por ciento de lo que tienen las AFPs es lo autorizado para que los fondos de pensiones le presten al sector agropecuario. Otras autoridades han indicado que solo 100 millones de los 150 serán los que fortalezcan al agro, pues 50 quedarán en reserva, precautelando la no descapitalización de la idea y, que el préstamo será a mayor interés que lo que en la actualidad se le presta a las entidades financieras, pues oscila entre el 3 y un poco más, pero para lo agropecuarios será entre el siete y nueve por ciento y que las entidades financieras han prestado más de mil millones a los del agro.Esta actitud del gobierno nos lleva a recordar el Decreto Supremo Nª 24935 del 30 de diciembre de 1997, en el gobierno de Hugo Banzer y en el cual se dispone la liquidación “voluntaria” del FONVIS. Situación que conlleva a que sean las empresas constructoras o las entidades financieras las beneficiarias de las soluciones habitacionales y quienes aportaron, es decir, los trabajadores, nuevamente quedaban en el olvido y marginados, beneficiando el gobierno a los que tenían los recursos económicos, por la necesidad que en ese momento se tenía en las arcas del Estado.Pero la acción de los aportante al FONVIS, el de ingresar a ocupar las soluciones habitacionales del Plan 1410 El Palmar demostró que los trabajadores no estaban dispuestos a perder en manos de los empresarios apoyados por el gobierno su aporte y el aporte del empleador por ese obrero. Y así sucesivamente las urbanizaciones fueron siendo ocupadas por trabajadores de diferentes empresas e instituciones; no solo en Santa cruz, sino en todo el país, en donde se sabía que existían viviendas o lotes que pertenecían al Ex Fonvis.Esa lucha de años y contra todos los gobiernos posteriores al de Banzer al fin rindieron sus frutos y, las soluciones habitacionales que fueron ocupadas quedaron en poder de los trabajadores y no en quienes ya disfrutaban de su cena sin haberse sentado a almorzar. Hoy considero que está ocurriendo lo mismo, lo que nosotros aportamos o mejor lo que nos dijeron que era nuestro ahorro, para cuando nos jubilemos lo estamos viendo –así sea el uno por ciento de lo que tienen las AFPs- se está yendo a un sector empresarial. Y nosotros, ¿cuándo nos vamos a beneficiar?, nos dirán cuando nos jubilemos, y nos prorratean y nos aseguran que vamos a vivir diez años más o si están dadivosos nos aumentan unos añitos, cual dioses que saben leer nuestro futuro. Pero qué futuro más negro; y podemos recordar lo que nos decían o hemos escuchado, estamos sentados sobre nuestra plata, pero vaya sorpresa, es solo para cuando decidas dejar de trabajar, mientras, si quieres vivir bien, tienes que endeudarte en los bancos en las cooperativas o en quien te preste, no solo al tres por ciento mensual, sino a una sarta de malandrines que prestan al quince, al veinte o entidades financieras que están en el veinticuatro, más o menos, pero de igual manera es alto y requisitos, como decía esa campaña publicitaria, FALTA, que vida del aportante, del que ahorra para su muerte, para no disfrutar más que unos cuantos años, tal vez menos de lo que han vaticinado.Es hora de preguntar, porque esperar de los asambleístas socialistas es lo mismo que los de la derecha o demócratas, para el pueblo, nada. ¿Por qué no nos prestan nuestra propia plata?, si al fin pueden prestarnos con un interés menor al de los bancos u otros. Si han promulgado un Decreto para que las AFPs, si desean le presten al empresario del agro, ¿por qué no otro Decreto para que nos presten, nuestra propia plata? Nuestro ahorro que sirva para cuando con los años de juventud podemos hacer cosas, no para cuando ya no podamos ni subir al micro o caminar solos. Que nuestro ahorro por ahora nos permita disfrutar de la vida, para vivir bien, no para morir bien. *Abogado y comunicador social