Estudio revela triple riesgo de que las lagunas de Tajzara se sequen

Resultados de un estudio hidroclimático advierten que la demanda de evapotranspiración en las Lagunas de Tajzara es tres veces más de las lluvias que caen en el lugar. Como consecuencia se podría tener la desaparición de los espejos de agua de esa zona.La investigación fue realizada por la consultora Rumbol SRL, en coordinación con el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap), luego que en el año 2016 se registrara la sequía  más aguda de los últimos años. Tanto así que captó la atención de instituciones nacionales, departamentales y municipales.
A un inicio se hizo un diagnóstico, pero luego se dieron cuenta que faltaba un balance hídrico, para saber cuánto es la precipitación fluvial, la evaporación, la radiación solar, velocidad del viento y demás aspectos que definen el clima del lugar.Es así que las conclusiones las hizo conocer con preocupación el director de la Reserva de Sama dependiente del Sernap, Francisco Arce, porque la evapotranspiración es considerada como bastante alta.“Se tiene que las precipitaciones en Tajzara, en promedio, es 400 milímetros por año, y lo preocupante es que la evapotranspiración está por encima de los 1.200-sostuvo-. El clima es más potente para absorber el agua”.Es ese sentido, Arce ejemplificó que con las lluvias se formará una capa de  menos de medio metro de agua y las condiciones climáticas demandarán tres veces más que eso para la evapotranspiración. Entonces no quedará excedente del líquido elemento.A la fecha, las lluvias no fueron uniformes en toda la cuenca. No aportó de manera igualitaria los recursos hídricos a los espejos de agua.La laguna de Pujzara aumentó  a un 70 por ciento, la que más establece permanece. Pero la denominada  Laguna Grande es la más inestable porque es plana y de menor profundidad. En ésta el nivel del agua no superó el 50 por ciento. Algo que no es normal en relación a la misma época de anteriores años. Exceptuando el 2016, que fue lo más crítico.Para el asambleísta departamental por Yunchará, Basilio Ramos, las escasas lluvias que se presentaron en el lugar, le hace estimar que las lagunas no recuperarán su nivel. Eso es una alerta  de que el 2017 se tendrá una cruda realidad sobre la sequía, si en febrero las precipitaciones no aumentan.Según el legislador, la Laguna Grande subió un 1,5 por ciento de lo que estaba. Espera que suba más de nivel para que se mantenga con agua todo el año.La alcaldesa de Yunchará, Gladys Alarcón, también reportó la misma situación, escasas lluvias. Por eso cree que las lagunas no recuperarán su nivel en esta gestión.Frente a esta situación, Arce manifestó que el agua de las lagunas debe ser usada para el sector agropecuario de manera más restringida, pero que cubra la demanda del sector. Como por ejemplo, instalar el riego tecnificado, por aspersión o por goteo, dejar de lado el de canal abierto.En el área de ganadería realizar bebederos específicos y no dejar a libre uso. De lo contrario, la desaparición de los espejos de agua se aceleraría más.  Por eso, los proyectos de aprovechamiento deben ser en base a precipitaciones de 400 milímetros por año.La sequía en Tajzara amenazó a 42 especiesEl año 2016 los impactos del cambio climático incidieron en la reducción de los niveles de agua de las lagunas de Tajzara, zona alta del departamento de Tarija, donde unas 42 especies de fauna acuática estaban en riesgo si no se tomaban acciones de emergencia. Sin embargo, en esta gestión el peligro continúa, pues las lluvias no fueron suficientes para que recuperen su nivel.Fuente: www.elpaisonline.com