El Gobierno lleva once años tratando de replicar en Bolivia el modelo cubano. Por un momento, el ejemplo a seguir era Venezuela, pero el desastre en el que cayó no da ni siquiera para nombrarlo. Al menos Cuba es una isla rodeada de secretos y todavía persiste ese romanticismo revolucionario que tanto cautivaba a García Márquez, por ejemplo. Nuestros gobernantes llevan todo ese tiempo haciendo viajes rutinarios, recibiendo personeros cubanos y acopiando asesoramiento y jamás se los ha acusado de conspirar contra Bolivia, aunque haber llevado a Venezuela a semejante calamidad, riesgo que corremos por estos lados, debería ser motivo de un juicio por traición a la Patria. En medio de todo esto, el encargado de negocios de Estados Unidos, Peter Brennan, dice que su país sigue interesado en normalizar las relaciones y pese a todo lo que se ha dicho últimamente insiste en reunirse con el presidente Morales. Un hombre de fe frente a un hijo pródigo.
Fuente: eldia.com.bo