A causa de la espera, pacientes tienen laceraciones muy grandes. Algunos pierden parte de la nariz. El Ministerio de Salud dio un lote de medicamentos.El Servicio Departamental de Salud (SEDES) denunció que hay desabastecimiento de medicamentos para enfermos de leishmaniasis, quienes por este motivo sufren una mayor mutilación en sus cuerpos. El Ministerio de Salud entregó el viernes una cantidad de fármacos pero aún evalúa si alcanzará o no.“Lamentablemente desde el año pasado estamos sufriendo desabastecimiento de los medicamentos para la leishmaniasis y los pacientes están desesperados porque su enfermedad avanza”, afirmó el responsable del Programa de Enfermedades Transmitidas por Vectores (ETV) del Servicio Departamental de Salud (SEDES) La Paz, Gunder Aguirre.La autoridad aseguró que ese desabastecimiento no sólo ocurre en La Paz, sino en todo el país. “Es el Programa Nacional de Leishmaniasis, dependiente del Ministerio de Salud, el que provee estos medicamentos, porque lamentablemente no los hay en el mercado, ni las empresas importadoras los tienen”, explicó el profesional.La leishmaniasis es una enfermedad parasitaria que se transmite por la picadura del vector llamado flebótomo hembra infectado. “Por lo general, la gente en La Paz se transmite porque ingresa a la selva o por migración”, afirmó Aguirre.Existen varias formas distintas de leishmaniasis. Las más comunes son la cutánea y la visceral. El tipo cutáneo causa llagas en la piel. El tipo visceral afecta los órganos internos, tales como el bazo, el hígado y la médula ósea.De acuerdo con Aguirre, el mosquito puede picar a una persona y que luego de un tiempo comenzará a tener lesiones cutáneas en el lugar de la picadura o en otra parte de la piel. Después, se forma una costra y la herida se abre y crece más y más. Las personas con esta enfermedad suelen tener fiebre, pérdida de peso y aumento de tamaño del bazo y el hígado.De acuerdo con datos del SEDES, La Paz es una de las regiones con mayores casos de esta enfermedad. Según los datos proporcionados por el programa, en el departamento existen 21 municipios endémicos de la patología, aunque los municipios más afectados son La Asunta, Cajuata y Palos Blancos. Todos están en el área del trópico y la Amazonia de la región.Los datos también revelan que desde enero hasta septiembre del año 2017 se reportaron 818 casos positivos de la enfermedad en todas sus formas. En 2016 se registró 1.030 casos.Aguirre contó que la mayoría de la gente que se reportó con esta enfermedad el año pasado no tuvo acceso a los medicamentos. “Eso sí, con los pocos fármacos que tuvimos priorizamos a los niños”, sostuvo.La autoridad recordó que en el municipio de Caranavi registraron a 50 niños con esta enfermedad. Los pequeños ya no querían asistir al colegio porque eran discriminados. “No podemos permitir aquello, por eso hemos decidido atender a esa población”, sostuvo.El experto aseguró, además, que los pacientes adultos sufren más porque no pueden curarse.Explicó también que si esas personas no reciben tratamiento siguen siendo portadores del virus y los mosquitos que no son infectados los pican, se infectan y diseminan la enfermedad.“Para controlar esta enfermedad se requiere un diagnóstico oportuno, el acceso al diagnóstico y el control vectorial”, resaltó Aguirre.En caso de detectar a una persona con leishmaniasis, el centro de salud tiene el deber de solicitar los medicamentos al SEDES, esta institución al Ministerio de Salud, para que luego se entregue al municipio.Si la enfermedad leishmaniasis es cutánea, el medicamento puede ser solicitado por el dermatólogo de tercer nivel. Justamente, estos galenos son los que se quejan porque tienen pacientes internados que sufren laceraciones en la piel muy grandes. Algunos ya perdieron la nariz o parte de la boca.Ante la persistente solicitud, el Ministerio de Salud entregó el viernes una cantidad de fármacos, pero se evalúa si este lote abastecerá la demanda de los enfermos en espera o igual habrá déficit para los nuevos pacientes de este año.Fuente: paginasiete.bo