El fútbol de antes…

EL FÚTBOL de ANTES…

Miraba la reanudación del fútbol español y fue imposible no recordar otras épocas, noches hermosas de futbol, amigos de siempre…

Siete de la noche: Kaliman y todo mundo en casa pegadito a la radio; Solín, Tatake, la Araña Negra, Mister X, etc.



Luego empezaba lo mejor:

Jugar fútbol en la calle.

El que más jugaba tenía su pelota viiiieeeja y pinchada.
Había que hablarle al «malo», al que tenía su pelota de cuero número cinco.

Con los años, ese malaso que no pateaba ni jollejo se volvió dirigente de fútbol.

Era picarísimo:

Cuando no lo hacíamos jugar por malo, agarraba su pelota y se iba: Fin del partido.
Pedíamos jugadores haciendo «piecitos».
El que pedía primero tenía la ventaja: Reclutaba al mejor.

Había reglas:

1. El gordo siempre iba al arco. Renegaba, pero había que asegurar el partido.

2. Si había un penal lo pelechábamos al gordo del arco y atajaba el mejorcito; antes se ponía las chinelas a modo de guantes.

3. Si faltaban jugadores, poníamos arcos chicos.

4. Las chinelas o dos jones eran los postes. La calle era la cancha y todos teníamos apodos.

5. ¡Taxi!, era el grito del arquero que servía de alarma para que el partido se detenga y pase el motorizado.
6. Si el arquero del otro equipo era más chico, era prohibido «cañonear».

El partido se ponía bonito cuando algunos padres se metían al juego.

Reglas.

1. Si eran dos padres, iba uno para cada equipo.

2. Si solo era uno, nos pasaban a otro jugador para equilibrar al «grande» que jugaba para ellos.

Lo mejor era cuando les jugábamos a los de «la otra calle». Pero espectacular era ganarle «a los del otro barrio».

1. Ahí no atajaba el gordo y la pelota del bueno se la parchaba días antes, al malo y futuro dirigente no se le avisaba…

2. Era prohibido patear fuerte en dirección a la casa de la vieja que nunca nos devolvía la pelota.

3. Si el partido estaba empatado y ya se hacía tarde se pactaba: «Un gol pa cualquiera», aunque el partido esté diez a uno.

…Y de pronto, el silbido que nadie quería escuchar: Papá parado en la reja y con el silbido te decía dos cosas:

1. » Se me baña.

2. » A dormir»

En eso pensaba, hasta que varios gritos de gol me llegaron desde la sala.

Eran mis hijos y varios chicos de la calle que jugaban fútbol en cuarentena.

…En Play Station.

EL ESCRIBIDOR


Fuente: El Escribidor