Don ‘Toto’, un paciente de hemodiálisis, cuidó de su esposa e hijo infectados con Covid -19

Tiene 61 años y también padece de diabetes. Dijo que curó a sus seres querido con vapores de eucalipto, aceite de pata, complejo B y jarabe de cebolla con miel. Te contamos su historia

Alejandra Arnez Montero

Don Toto (Foto: Fabiola Montero)



Hace dos semanas ‘Don Toto’ (como le dicen sus amistades) tuvo una pelea dura para salvar a su esposa e hijo del Covid-19. Y sí, puede que digan que muchos lo hacen, pero este cruceño de 61 años hace seis años es paciente de hemodiálisis y tiene diabetes.

Al ver que su pareja, Flavia Montero Rioja, con falta de aire para respirar, pérdida de olfato y tos, se fue a buscar eucalipto, manzanilla, jengibre, un jarabe expectorante, cebolla y miel para poder paliar los síntomas. A los días, su hijo Paul, que va a casa de sus padres porque allí funciona su taller de autos, también empezó con los síntomas propios del virus.

Ante eso Don Toto también empleó su protocolo para ayudar a su hijo, quien ahora se encuentra mejor al igual que su esposa. «Ella ya está sin los síntomas y ahora la tengo sentada a mi lado…», dijo mientras respondía a la entrevista.

Tuvo que ser su propio enfermero

Él igual tuvo algo de tos y fiebre, pero no se dejó caer. Tomó zumo de cebolla con miel y aceite de pata. Además, después de pasar por eso, volvió a hacer sus hemodiálisis en el Hospital Los Pocitos donde tres veces a la semana pasa cuatro horas en su tratamiento.

Don Toto iba a que le realicen la hemodiálisis porque un vecino que tenía permiso de circulación lo acercaba, pero lamentablemente ahora ya no se puede porque esa persona ya empezó a trabajar.

La pandemia también afectó su economía

Antes de que se declare emergencia sanitaria, Toto trabajaba como guardia de seguridad cerca del Hospital Japonés. Estuvo como año y medio en esa fuente de trabajo, pero al declararse emergencia fue retirado.

«Por una parte fue bueno, porque por mi condición me podría haber contagiado de Covid-19 mucho antes…así que ahora vivo de la renta dignidad y de algunas chucherías», confesó.

Fuente: El Deber