Fuente: lostiempos.com
La familia y los amigos son esenciales para Humberto Sánchez. Luego de pasar un año lejos de la gestión pública tras la renuncia a la Alcaldía de Sacaba, vuelve con el objetivo de ser el gobernador de Cochabamba con el Movimiento Al Socialismo (MAS).
Aún se le escapan lágrimas cuando recuerda las amenazas que hicieron a sus nietos en los conflictos de 2019, pero no pierde la fuerza para hablar de los proyectos que tiene para el departamento. Su programa contempla la industrialización de la basura para tres regiones y una ciudadela hospitalaria.
Humberto Sánchez nació en la comunidad Ucuchi de Sacaba. Recuerda sus años de escuela y trabajo. El mayor de cinco hermanos aceptó la responsabilidad que le dieron sus padres para apoyar en el sustento de su hogar.
Sánchez recuerda que, cuando estaba con su abuela, era el “cuidador de la frutilla”. Tenía que despertar antes de que salga el sol para llegar evitar que las aves se coman la fruta. Luego, volvía a casa al anochecer.
“Así se trabaja en el campo y a eso estoy acostumbrado; por eso, me despierto a las 4:00”, comenta.
Su adolescencia transcurrió en el trópico de Cochabamba, donde además incursionó en la vida sindical. En un inicio, fue para cumplir con la representación de su familia, pero los debates despertaron su interés poco a poco hasta que llegó a ocupar puestos en diferentes sindicatos y representaciones.
“Llevo 35 años en la vida sindical y 20 en política”, comenta. En 2004 fue designado subprefecto y en 2010 llegó a ser alcalde de Sacaba. La gestión pública la considera “delicada”, pero en 2019 pasó uno de los momentos más amargos de su carrera política.
Los conflictos políticos de octubre llevaron a que Sánchez recibiera amenazas de la quema de su vivienda, pero el momento más doloroso fue cuando amenazaron a sus nietos. El candidato se quiebra cuando recuerda este periodo.
“Conmigo lo que quieran, pero por qué tienen que meterse con la familia, niños. (…) Nosotros hicimos poner cámaras y veíamos los autos quedarse en la puerta a las tres de la madrugada y yo no pude con la presión”, contó Sánchez.
El candidato explicó en varias oportunidades que su familia era lo más importante. Pero sus nietos “se robaron mi corazón, incluso más que mis hijos”, dijo entre risas.
Durante un año estuvo alejado de la gestión pública, pero se mantiene vigente en la vida sindical como secretario del instrumento político en el Sindicato La Quiña de Ucuchi. Junto a su esposa, tienen un vivero, que descuidó desde que comenzó la campaña política.
Ciudadela hospitalaria
Asimismo, Sánchez habló con Los Tiempos sobre el plan de gobierno que tiene para el departamento. Entre los puntos referenciales está la salud, medioambiente y desarrollo productivo agropecuario.
Sánchez explicó que trabaja en un plan inmediato para enfrentar la pandemia y otro plan a mediano y largo plazo en salud. Para ello, realiza un diagnóstico de las cinco regiones del departamento, la infraestructura disponible y el recurso humano.
Asimismo, dijo que se trabaja en una ciudadela hospitalaria en el ex club hípico que fue expropiado para hacer el estadio el Batán; un proyecto que nunca se concretó.
“Vamos a volcar la torta para que ahí (en el club hípico) se cumpla este sueño de los cochabambinos. La ciudadela hospitalaria”, dijo Sánchez.
Agricultura para el desarrollo económico
La economía cochabambina fue duramente golpeada por la pandemia del coronavirus. Muchas pequeñas empresas cerraron y miles de personas se quedaron sin trabajo.
El candidato a la Gobernación apuesta por el fomento agropecuario para el desarrollo productivo y económico del departamento.
“Tenemos que impulsar el aparato productivo para mejorar el desarrollo económico de Cochabamba. Para eso se plantea la economía naranja, que significa producir lo nuestro, consumir lo nuestro, industrializar y el excedente exportar”, precisó Sánchez.
Con este fin, indica que trabaja en la elaboración de un plan de acción productiva para cosechar hasta tres veces al año. Sánchez apela a los conocimientos que adquirió desde niño trabajando en el campo; un campo que hasta hoy no olvida y define su vida diaria.
El objetivo de Sánchez es industrializar la basura
El manejo de residuos es una deuda pendiente en todo el departamento y trajo un sinfín de problemas en los diferentes municipios. El candidato a la Gobernación Humberto Sánchez proyecta un complejo industrial de residuos sólidos para la región metropolitana.
“Vamos a unirnos y coordinar con todos los municipios para resolver este tema”, señaló Sánchez.
Sin embargo, el eje no es la única región en el plan de industrialización de residuos
“Será para tres regiones: trópico, cono sur y valles. Que esperen un ratito, por ahora, los de la región andina. No los olvidamos, pero estamos planificando”, aseveró el candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS).
Junto al trabajo de gestión de residuos, también proyecta el cuidado y recuperación del Parque Nacional Tunari (PNT).
“No hay un plan de protección al Parque Tunari, y el otro problema son los asentamientos humanos clandestinos. Todo esto hay que cambiar. Tenemos que trabajar con los municipios para preservar nuestro parque nacional”, afirmó Sánchez.
Agregó que se plantea asignar presupuesto para que haya vigilantes y un observatorio para un verdadero control de todas las personas y vehículos que entran y salen.
Plantea mejorar el río Rocha
Humberto Sánchez Sánchez tiene 50 años y nació en Ucuchi, Sacaba.
Está casado, tiene dos hijos y tres nietos.
Trabajó desde muy joven en la agricultura.
Fue subprefecto de la provincia Chapare (2004 y 2009) y alcalde de Sacaba en dos gestiones (2010-2015 y 2015-2019).