Mientras un “ejército de mandiles blanco” precautela por la salud, hay aglomeraciones en espectáculos al aire libre donde no hay medidas de seguridad sanitaria.
Erick Ortega/ La Paz
La Plaza de los Héroes en inmediaciones de la iglesia San Francisco es un escenario improvisado para la realización de estos eventos, especialmente al finalizar la tarde. Las aglomeraciones coinciden con la crisis sanitaria que vive el país debido a la variante Ómicron en una cuarta ola con los más altos registros de contagios desde que el virus ingresó a Bolivia, en marzo de 2020.
Antes de las siete de la noche del viernes 7 de enero el sonido de un pito provoca risas entre el público. El actor está vestido con un enterizo morado y un gorro multicolor en la cabeza, tiene el rostro pintado y no lleva ningún barbijo encima. Entre su público hay gente con la mascarilla facial, pero no son la totalidad. Por cada contagiado por Ómicron habrán otros ocho en menos de 24 horas según datos del Servicio Departamental de Salud de La Paz.
Mientras tanto las gradas del lugar están copadas y allí permanecen sentadas decenas de personas (casi hombro con hombro) que ríen con las ocurrencias del sujeto que imita a algunos de los presentes y después hace de director de orquesta y juguetea con el público… se hace entender sin decir ni una palabra.
La Alcaldía de La Paz instaló un punto de vacunación en este sector con gran concurrencia. Las filas serpentean por el atrio de la iglesia San Francisco. Es la normalidad de un sector con alto tráfico peatonal y por tanto con más posibilidades de contagio. Las cifras oficiales indican 20.000 vidas perdidas en el país desde que inició la pandemia.
Es común ver escenas de aglomeración. Cada domingo junto al mercado Lanza van tres artistas callejeros (sin barbijo ni medidas de seguridad) para hacer las delicias del público con diferentes skecths, pero sin ningún reparo de la situación pandémica. Ni la Intendencia ni la Policía han tenido poder para evitar estas aglomeraciones. Los artistas tampoco invitan a su público a cuidarse usando barbijo, pero sí piden monedas por sus presentaciones.
Antecedentes
Al finalizar diciembre, la Alcaldía de la ciudad de La Paz prohibió las fiestas de fin de año debido al incremento de casos positivos de covid. Entonces el alcalde paceño Iván Arias anunció: “Primero es la vida, después las fiestas”. La autoridad edil también solicitó a la población que evite las aglomeraciones para disminuir las posibilidades de contagio.
Pero no solo en La Paz se efectuaron estas medidas, en Santa Cruz se decretó ley seca y en Cochabamba y El Alto se prohibieron las fiestas.
Las aglomeraciones al aire libre también tienen restricciones debido a la pandemia. Por ejemplo, la selección nacional de fútbol jugó sus partidos de eliminatorias sin vender todo el aforo del estadio Hernando Siles.
En Santa Cruz, donde la situación es más crítica se determinó que la población tenga horarios permitidos de circulación (de 05:00 a 21:00).
Semana contagiosa
Bolivia tuvo una de las semanas más críticas desde que comenzó la pandemia. En lo que va de la semana se rompieron distintos récords de contagio.
El martes 4 de enero la Dirección Nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud y Deportes informó que 9.242 personas resultaron positivas a covid.
El miércoles, por primera vez, el país superó la cifra de 10.000 personas que habían contraído la enfermedad.
El jueves y viernes las cifras fueron en ascenso en Bolivia, lo cual determinó tomar diferentes medidas radicales en otras regiones.
Si bien Santa Cruz lidera la lista de contagios, La Paz va en constante aumento. Por ejemplo, el martes 4 registró 293 casos positivos y dos días después contabilizó 812.
Los últimos días, en el departamento de La Paz las cifras fueron en constante ascenso. Autoridades sanitarias y municipales solicitaron redoblar las medidas de seguridad para evitar mayores contagios.
Además, la aparición de la variante Ómicron fue clave para que los contagios se dispararan.
El alcalde Iván Arias anunció que la campaña de vacunación será las 24 horas del día y los siete días de la semana en diferentes macrodistritos del municipio.
La primera autoridad de la ciudad acotó que un “ejército de mandiles blancos” irá casa por casa para reforzar la vacunación, además se abrieron nuevos centros de inoculación, como por ejemplo la Terminal de Buses de La Paz.
A pesar de la voluntad de autoridades sanitarias y municipales en los espectáculos al aire libre en la ciudad de La Paz, especialmente en la Plaza de Los Héroes, no hay controles de seguridad sanitaria. Incluso hay policías alrededor que se convierten en simples espectadores.
Las imágenes son casi las mismas que en la época anterior a la pandemia. Las risas se escuchan por doquier en estos espectáculos que se ofrecen en el centro citadino paceño, mientras las cifras de contagio van en constante aumento.
20.000
PERSONAS
al menos han fallecido
desde que comenzó la pandemia
en Bolivia, en marzo de 2020.
Fuente: paginasiete.bo