Advierten que si se sigue ejerciendo presión sobre aumentos imposibles, se forzará el cierre de empresas de Bolivia. La CNC afirma que hay más informalidad.
Fuente: Página Siete / La Paz
Los empresarios privados, alarmados por la propuesta de la Central Obrera Boliviana (COB), piden ser escuchados por el presidente del Estado, Luis Arce, para exponerle sus argumentos sobre el salario de este año. Y la Cámara Nacional de Comercio (CNC) advierte que un incremento puede presionar sobre el déficit fiscal.
La COB planteó un incremento del 10% al salario mínimo nacional y 7% al salario básico en el pliego presentado el pasado jueves al Gobierno.
La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) expresó ayer su extrema preocupación por esta demanda, que ignora la grave situación en la que se encuentran las empresas, emprendimientos y unidades productivas del país por los efectos sostenidos de la pandemia de coronavirus.
En un comunicado añade que a esto se suma la gran incertidumbre mundial respecto al rumbo de la economía.
“Nos alarma mucho más la falta de compromiso de la dirigencia de la COB con los miles de trabajadores y trabajadoras que han ingresado en la informalidad, han perdido sus fuentes laborales o las van a perder, si se sigue ejerciendo presión salarial sobre los empleadores con incrementos imposibles, que van a forzar el cierre de las unidades productivas que hoy generan y sostienen más del 70% del empleo digno en el país”, señala la CEPB en un comunicado.
Según los empresarios privados, los problemas económicos y la disminución de recursos, que afectan a las empresas de todos los rubros y regiones, alcanzan también a las universidades, gobernaciones, alcaldías y otras instituciones del Estado.
Afirman que estos inconvenientes no pueden resolverse imponiendo más cargas sobre los que generan empleo, ni adoptando medidas como las del incremento salarial que solo benefician al 17% de los trabajadores, en detrimento del resto.
Déficit fiscal
El gerente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Gustavo Jáuregui, alertó que el país lleva ya ocho años consecutivos con un déficit fiscal que complica las finanzas públicas. “Un posible incremento salarial también complicaría la situación del Gobierno nacional y subnacionales”, precisó.
Señaló que en 2021 Bolivia cerró con una tasa de inflación de 0,9%, menor al 1%, lo que indica que el índice de precios de la canasta familiar se mantuvo estable sin mayor variación y, por tanto, el poder adquisitivo de las personas también no sufrió mayor variación.
De acuerdo con Jáuregui, en Bolivia cerca del 40% del total de la población, es decir 4,4 millones de personas, están dentro de la población económicamente activa (PEA).
De esa PEA, según el reporte del Instituto Nacional de Estadística (INE) al tercer trimestre de 2021, el 93,7% (4.202.000 personas) estaban con alguna actividad y el 6,3% (282 mil personas) se encontraban desocupadas o sin actividad.
De esas personas ocupadas se estima que el 32%, es decir cerca al 1,3 millones de personas son dependientes.
Por ende, para la CNC se podría inferir que solo ese grupo cuenta con un empleo formal con beneficios sociales y el restante 68%, es decir 2,8 millones de personas son independientes, a cuenta propia o en menor proporción no cuentan con un trabajo remunerado.
Esto significa que esa población en su mayoría está dedicada al comercio o servicios, pero en el ámbito informal.
Diálogo
En atención al mandato del Convenio 131 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) respecto a la obligación de consultas exhaustivas a los empleadores y los trabajadores para fijar el salario mínimo, la CEPB solicita una reunión y ser recibidos sus representantes por el presidente Luis Arce.
Los empresarios privados piden un trato similar que el que se le dio a la COB para presentar sus argumentos y propuesta sobre el salario.
La CNC instó al Gobierno nacional para que convoque a un diálogo tripartito con la participación de empleadores y trabajadores y se delinee una agenda de trabajo que coadyuve con mejorar las condiciones e índices del empleo formal en Bolivia.
El año pasado, luego de un proceso de negociación entre el Gobierno y la COB se llegó a un acuerdo para incrementar únicamente en 2% el salario mínimo nacional, mientras que el haber básico quedó congelado.
Esta remuneración es el monto que fija el Gobierno cada año, por el cual ningun trabajador puede percibir un salario inferior a éste. En 2021 ascendió de 2.122 a 2.164 bolivianos.
El haber básico es el monto de que se fija a favor de un obrero en función al cargo que desempeña dentro de una empresa.