A comparación de una granada de gas lacrimógeno común, la de triple acción es altamente peligrosa y puede llegar a ocasionar la muerte.
Fuente: El Deber
La explosión de una granada de triple acción en el interior de un coliseo de la Universidad Tomás Frías de Potosí provocó una avalancha humana que cobró la vida de cuatro universitarias y dejó a más de 80 personas heridas.
Mientras las investigaciones prosiguen y ya han sido aprehendidos cuatro presuntos responsables, EL DEBER consultó al especialista en seguridad y defensa, Jorge Santisteban, sobre las características del tipo de granada y sus diferencias con la granada lacrimógena normal.
Santisteban señaló que la granada de triple acción es altamente peligrosa por los efectos que ocasiona, como lagrimeo excesivo, pérdida de visión y vómitos.
“Pueden hacer perder la vista e incluso la vida de las personas cuando se lanzan en lugares cerrados porque impide la respiración y llega a sofocar y a limitar el ritmo cardiaco”, especificó Santisteban.
El experto indicó que este tipo de granada es usada para controlar el terrorismo por unidades especializadas, ya que el gas pimienta que contiene puede incapacitar, aturdir y controlar a los agresores.
Sin embargo, enfatizó que no son de uso común, por lo que los estudiantes que lanzaron esta granada en la universidad, probablemente la adquirieron a través del mercado negro. Dijo que el precio de una granada lacrimógena normal oscila entre los Bs 100 y 150, y el de una de triple acción es un poco más costosa.
Cómo reaccionar
Si la granada es arrojada en un ambiente abierto, Santisteban recomienda alejarse rápidamente de la nube de gas y recibir atención médica si se alcanzó a recibir el gas o si presenta algún síntoma inmediato.
En cambio, si explosiona en un espacio cerrado, se debe recurrir a asistencia médica de urgencia y se debe aplicar oxigenación artificial.
“Aquí no aplican las técnicas criollas como echarse agua, orín u otras que se usan para la granada lacrimógena. Se debe recibir asistencia médica inmediata porque puede provocar un daño irreversible para la salud”, añadió.
Reveló que, en un coliseo cerrado de 80 metros como el de la Tomás Frías, la granada pudo haber afectado de manera directa y grave a todas las personas que se encontraban a un radio de 10 metros a la redonda. Los siguientes 50 metros pudieron ser afectados con menor intensidad, pero igual de gravedad. Mientras que aquellos que estaban en los alrededores pudieron resistir con mayor tranquilidad.