CIJ emitirá su fallo sobre las aguas del Silala el jueves; experto advierte resultados negativos

Milton Lérida sugirió que todas las exautoridades que participaron en la fracasada demanda marítima y en el Silala deben ser acusados de “traición a la patria” por haber expuesto al país y sus recursos naturales

Gobierno debe garantizar defensa de aguas del Silala - El Diario - Bolivia

Aguas del Silala. Foto de Archivo: El Potosí



La Paz, 28 de noviembre de 2022 (ANF).- La pésima política exterior de Bolivia, la deficiente formación de profesionales y la mala conducción de este caso desde el Gobierno boliviano fueron señalados como las principales causas que pueden provocar un fallo adverso en el juicio por las aguas del Silala y cuyo veredicto será conocido este jueves.

“Ha sido una falla más interna del Gobierno, pese que aquí han intervenido varios expresidentes de la República,  varios excancilleres, inclusive ha estado el presidente de la Corte Suprema de Justicia, que es el primer hombre que conoce el derecho boliviano; sin embargo, ellos han sido asesores del gobierno del señor (Evo) Morales y bueno han llevado a esta situación. Por el otro, lado hay que tomar en cuenta que nos falta una política internacional como Estado”, declaró Milton Lérida, investigador que vive en la zona y fue el que denunció las canalizaciones del Silala desde 1991, en contacto con la ANF.

En junio de 2016, el gobierno chileno presentó una demanda contra Bolivia por el uso de las aguas de ese manantial que está ubicado en el departamento de Potosí en el cantón Quetena Chico, provincia Sud Lipez. Luego de seis años y cinco meses se conocerá la resolución de los jueces que conocieron el caso y Lérida cree que los fallos de los gobiernos llevarán nuevamente a una derrota diplomática internacional.

“Francamente, yo no creo que tengamos un fallo en favor de Bolivia”, alertó Lérida y recordó que en 2016, justo el 23 de marzo, fue el propio expresidente Evo Morales quien anunció un nuevo proceso contra Chile por las aguas del Silala, pero no pasaron ni tres meses cuando el gobierno del vecino país fue el demandante ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).

El experto argumentó que la falta de formación de los profesionales bolivianos hizo que esta demanda prosiga un curso que debió ser rechazado en ese alto tribunal internacional, ya que los dos estados tenían un acuerdo privado sobre el uso de ese recurso hídrico para su uso; en cambio la jurisdicción de la CIJ alcanza a litigios entre estados, como fue el caso de la demanda marítima.

El investigador hizo esta referencia recordando que en septiembre de 1908 se firmó un Contrato de Concesión (CC) de las aguas del Silala entre la Prefectura de Potosí y la Empresa The Bolivia Railway Company Limited, en el marco de la ley de aguas del 28 de noviembre de 1906, por el lapso de 90 años, al cabo de los cuales esa prefectura dio por concluido el contrato y desde entonces surgió ese conflicto.

“No tenemos diplomáticos de carrera de derecho internacional público, las universidades del Estado no han formado los recursos humanos, no existen profesionales. Había una Escuela Diplomática que el gobierno de Evo Morales en su primera etapa ha cerrado, cuando el canciller era David Choquehuanca, que ahora es Vicepresidente”, recordó.

Lérida sugirió que todos los que participaron en los dos casos, tanto la fracasada demanda marítima como este proceso por las aguas del Silala, deberían ser sometidos a un juicio de responsabilidades porque expusieron al país y que ese delito es tipificado como “traición a la patria”.