Efectivo: Semaglutide una vez por semana en adolescentes con obesidad

 

Una dosis semanal de 2,4 mg de semaglutide subcutánea, un agonista del receptor del péptido 1 similar al glucagón, se usa para tratar la obesidad en adultos (https://eju.tv/2022/10/eficacia-de-semaglutide-utilizada-durante-104-semanas-en-adultos-con-sobrepeso-u-obesidad-el-ensayo-step-5/), pero era muy necesaria una evaluación de la efectividad de este fármaco en adolescentes obesos.



Wenghuber y colaboradores acaban de publicar  (NEJMed.November 2, 2022DOI: 10.1056/NEJMoa2208601) los resultados de un estudio doble ciego, de grupos paralelos, aleatorizado, controlado con placebo. Reclutaron a adolescentes (12 a <18 años de edad) con obesidad (un índice de masa corporal [IMC] en el percentil 95 o superior) o con sobrepeso (un IMC en el percentil 85 o superior) y al menos una condición coexistente relacionada con el peso. Los participantes fueron asignados al azar en una proporción de 2:1 para recibir semaglutide subcutánea una vez a la semana (en una dosis de 2,4 mg) o placebo durante 68 semanas, además de una intervención en el estilo de vida(dieta, ejercicio,etc). El punto final primario fue el cambio porcentual en el IMC desde el inicio hasta la semana 68; el criterio de valoración secundario de confirmación fue la pérdida de peso de al menos un 5 % en la semana 68.

Un total de 201 participantes fueron aleatorizados y 180 (90%) completaron el tratamiento. Todos menos uno de los participantes tenían obesidad. El cambio medio en el IMC desde el inicio hasta la semana 68 fue de −16,1 % con semaglutide y 0,6 % con placebo (diferencia estimada, −16,7 puntos porcentuales; intervalo de confianza [IC] del 95 %, −20,3 a −13,2; P<0,001). En la semana 68, un total de 95 de 131 participantes (73 %) en el grupo de semaglutide tuvieron una pérdida de peso del 5 % o más, en comparación con 11 de 62 participantes (18 %) en el grupo de placebo (odds ratio estimado, 14,0; IC del 95 %, 6,3 a 31,0; P<0,001). Las reducciones en el peso corporal y la mejora con respecto a los factores de riesgo cardiometabólicos (circunferencia de la cintura y niveles de hemoglobina glicosilada, lípidos [excepto colesterol de lipoproteínas de alta densidad] y alanina aminotransferasa) fueron mayores con semaglutide que con placebo. La incidencia de eventos adversos gastrointestinales fue mayor con semaglutide que con placebo (62% vs. 42%). Cinco participantes (4 %) en el grupo de semaglutide y ningún participante en el grupo de placebo tuvieron cálculos en la vesícula biliar. Se informaron eventos adversos graves en 15 de 133 participantes (11 %) en el grupo de semaglutide y en 6 de 67 participantes (9 %) en el grupo de placebo.

Se puede concluir que  el tratamiento una vez a la semana con una dosis de 2,4 mg de semaglutide es un tratamiento efectivo para la obesidad en los adolescentes ( ver Figura), un problema cada vez más significativo en norte,centro y Sud América.

Ronald Palacios Castrillo,M.D.,PhD.