En la época de Titanic, la película que la consagró definitivamente como diva del cine, se hacían alusiones constantes al peso de Kate Winslet. Y ahora la actriz acaba de hablar del tema en una entrevista para el Sunday Times.
Fuente: revistavanityfair.es
Cuando la gordofobia marcó su carrera
“Me llamaban ‘sebo’ y cuando estudiaba interpretación me decían que debía conformarme con papeles de chica gorda. Y no sólo eso. Cuando era más joven, mi agente recibía llamadas telefónicas en las que le preguntaban cuánto pesaba», confiesa en la entrevista. Ahora que tiene 47 años, a la actriz británica ya no le afectan esas etiquetas y apelativos que tanto la hicieron sufrir y, por el contrario, se alegra de que la industria del cine esté avanzando en materia de inclusión de más tipos de cuerpos. No obstante, sigue preocupada por el efecto psicológico que ciertos dictados estéticos puedan tener en las nuevas generaciones. Su preocupación es la de cualquier madre. En particular, Kate Winslet piensa en su hija Mia Threapleton, de 22 años, que interpreta a su hija en la serie británica I Am Ruth. En ella, Winslet interpreta a una madre angustiada al presenciar cómo su hija adolescente se encierra en sí misma, consumida por las presiones tóxicas de las redes sociales.
Una nueva generación de mujeres
«Lo bueno es que la generación de mi hija sabe cómo utilizar su voz y hacerse escuchar, especialmente las más jóvenes. Eso me impresiona. Cuando yo era joven, solíamos hablar únicamente cuando nos hacían una pregunta directa. Ahora no es así. Las mujeres jóvenes son más fuertes y están más orgullosas de sus cuerpos«, opina Kate Winslet. Pero eso no quita que haya que reconocerle el mérito de haber defendido siempre la validez de su físico tal y como es.
Artículo original publicado por Vanity Fair Italia y traducido y adaptado por Darío Gael Blanco. Accede al original aquí.
Leonardo Di Caprio en Titanic
