‘Tocha’ empezó robando bancos y pasó a ser un capo del PCC

Fuente: El Deber

Ivan Alejandro Paredes

Felipe Edvaldo Menezez Iglesias cumplía 20 años y se iniciaba en el mundo de la delincuencia robando bancos en el Estado de Pernambuco, en Brasil. Antes solo era experto en robos a personas. Pasaban los años y de a poco ingresó al mundo del narcotráfico y del sicariato. Escapó varias veces de cárceles en Brasil e hizo lo mismo en Bolivia, donde cumplía labores de sicario, pero también de transporte de cocaína hacia su nación. Menezez es conocido como Tocha y es un capo del PCC. 

André Luis Xavier da Rocha. Con este nombre se conoció a Menezez cuando, junto a su compatriota Emerson Michael Da Silva, victimó al empresario Wilson Ledezma en la localidad de Minero, en Santa Cruz, el 22 de marzo de 2022. 

Menezez Iglesias cuenta con un amplio historial en su país. Tiene al menos 40 casos en su contra, que datan de hace casi 20 años. Enfrenta acusaciones por los delitos de robo mayor, asalto en bancos, uso de armas, narcotráfico, asesinato de policías y otros ciudadanos, uso de documentos falsificados, organización de grupos delictivos y pandillas, delitos contra la propiedad, entre otros. Además, se fugó varias veces de las cárceles brasileñas y otras quedaron en intentos.

El 14 de septiembre de 2021, fue la última vez que Felipe Edvaldo estuvo encerrado en una cárcel de Brasil. En ese entonces tres reclusos intentaron darse a la fuga, pero solo él lo consiguió. Desde entonces era buscado en su país.
En 2013, el también considerado “uno de los bandidos más peligrosos del estado de Pernambuco”, junto a otros dos reos, intentó fugarse de la Casa de Privación Provisional de la Libertad del Agente Luciano Andrade Lima (CPPL I), en Itaitinga, un municipio del estado de Ceará, en la región nordeste de Brasil.

Bajo el mismo modus operandi, en septiembre de 2021, el sicario brasileño de alta peligrosidad huyó del centro penitenciario Dr. Edvaldo Gomes, en el municipio brasileño del interior del estado de Pernambuco, Petrolina. De acuerdo con la Secretaría de Resocialización (SERES) de Brasil saltó el muro del penal.

Luego pasó a Bolivia, donde realizó trabajos de sicariato, pero también se dedicaba al transporte de cocaína hacia Brasil. En el país logró escapar del penal de Palmasola tras ser detenido por la muerte del empresario del norte cruceño. Después de 30 horas de su fuga fue recapturado y se decidió trasladarlo a la cárcel de Chonchocoro, donde el martes salió fácilmente a un hospital y nuevamente se fugó asesinando a uno de sus escoltas. Hoy, está de regreso en Chonchocoro.