Testigo muerto – embargo levantado. ¿De eso se trata?

Piensa mal y acertarás es el famoso refrán que nos lleva a reflexionar en este penoso y vergonzoso acto de corrupción, que los bolivianos estamos siendo “testigos aún vivos”. La mentira es una de las conductas más comunes de los políticos en nuestro país, llámense oficialistas u opositores. Aunque en ocasiones pueden parecer inofensivas algunas de ellas, otras, en cambio, pueden tener graves consecuencias ante el pueblo que los eligió, en aquellos que creen en sus gobernantes o por último en aquellos que simplemente viven, trabajan y esperan que todo marche para no verse perjudicados. También, se crea un problema grave en sus relaciones interpersonales, familiares y en el propio aparato estatal donde ellos representan a un gobierno elegido democráticamente.

En primer lugar, es importante destacar que la mentira puede adoptar diversas formas. En ocasiones se trata de una mentira directa, en la que se dice algo que no es cierto de manera deliberada. Sin embargo, existen también otros tipos de mentira, como la omisión de información importante, la exageración de los hechos o la manipulación de la verdad para conseguir un objetivo determinado. Este es el tipo de mentiras que obsesiona al político, pero sobre todo a quien ostenta el poder totalitario del ejecutivo y del judicial del Estado Boliviano, como es el caso de Arce Catacora y de su gabinete ministerial actualmente.



Pero, ¿por qué mienten? Las causas pueden ser múltiples y variadas. En algunos casos, se trata de una conducta aprendida, es decir, que han aprendido a mentir a lo largo de sus vidas y lo hacen de manera automática sin ser conscientes de ello, este es el caso del ministro de Justicia, Iván Lima, por su propia profesión de abogado. En otros casos, puede ser el resultado de una baja autoestima, un miedo a la crítica o al rechazo, o una necesidad de controlar la situación, y, en este cuadro lo personalizamos al ministro de Obras Públicas ,Edgar Montaño.

Es importante tener en cuenta que mentir puede tener graves consecuencias, tanto a nivel personal como social. En el ámbito personal, la mentira puede erosionar la confianza que tienen en sí mismos, así como en los demás. Además, puede llevarlos a sentir culpa, ansiedad o estrés, especialmente si los descubren en sus mentiras, como viene ocurriendo en el caso de la corrupción de la ABC en el tema de la carretera Sucre-Yamparáez.

En su ámbito social cercano, la mentira puede tener consecuencias igualmente negativas. En muchas ocasiones, la mentira puede afectarles seriamente sus relaciones interpersonales, dañando la confianza y el respeto que los demás tienen hacia ellos, como ser la del presidente y de las personas cercanas a él. En algunos casos, como viene sucediendo, puede incluso llevar a cabo conflictos y rupturas definitivas, que es lo que podemos pronosticar desde ahora.

El viernes pasado, Iván Lima exhortó al diputado Héctor Arce, que diga qué había pasado con el testigo protegido. “¿Sabían ustedes compañeros de la prensa que el testigo protegido ha muerto en un accidente de tránsito en Miami, en EEUU? ¿Sabían ustedes que los Bs 8 millones o casi 9 millones que se denuncia de coimas han aparecido en la ciudad de Sucre?”, decía libre de cuerpo y de lengua, frases que se están convirtiendo en su calvario y denotan claramente su participación criminal en el desaparecimiento de un testigo protegido. Además, reveló que Felipe Sandy, era el nombre del “testigo protegido”, que supuestamente había fallecido en Estados Unidos. Es más, el ministro los consideró, al testigo y al diputado como “cómplices del hecho delictivo y encubridores”. Cuatro días más tarde se tuvo que tragar sus palabras al quedar descubierta su falta de sinceridad.

Ahora bien, de qué manera estas aseveraciones que hizo el ministro, que también fueron secundadas por Edgar Montaño, les está provocando un efecto boomerang. Lo más anecdótico, es que ellos mismos se olvidan de las palabras vertidas en sendas conferencias de prensa que convocaron el año pasado, más precisamente el día 15 de septiembre del año 2022, cuando señalaban: “En este momento tenemos un proceso que cuenta con prueba y evidencia clara, con relación a los responsables del proceso de contratación y la comisión, también a la empresa y a los que han actuado para llevarse el dinero, esta es la prueba que tenemos en este momento; en una investigación penal no podemos hacer afirmaciones si carecemos de prueba”, sostuvo la autoridad”

Por todos estos detalles, es fundamental aprender a reconocer la mentira y afrontarla de manera efusiva y directa. Es importante prestar atención a ciertos indicadores y desempolvar la historia de hechos recientes que involucran también a estos funcionarios públicos, que demuestran hilos conductores que nos llevan a pensar mal del ministro Iván Lima, haciéndolo aparecer como parte esencial de este crimen que conlleva dos delitos, entre ellos la muerte del testigo protegido.

Por investigación del periodista Junior Arias, el año 2022 informaba lo siguiente: “En octubre de 2021 el Banco Unión solicitó el embargo de los bienes de Iván Lima por el incumplimiento de pagos de un crédito de Bs 1.7 millones adquirido en marzo de 2017. Y luego complementa que, en mayo del 2022, Lima paga su deuda Bs. 1.487.659 y logra que la entidad financiera “desista del proceso judicial y se pida al juez en Materia Civil se levante el embargo de sus bienes registrados en Derechos Reales”. ¿Por qué tocamos este punto? Se preguntarán. Pues bien, si el ministro Lima, durante 4 años incumplió sus pagos al banco, lo que significa que no tuvo la capacidad suficiente para hacerlo, seguramente por su sueldo de ministro que es de 20 mil Bs más o menos al mes, y el monto del préstamo alcanzaba a un millón y medio en ese entonces, como era posible que en 6 meses desde el embargo que sufrió, hubiera podido ahorrar y juntar la suma requerida para pagar la deuda en mayo del 2022.

Sigamos, porque esto se pone interesante y se enlaza con el tema de la carretera que hacemos referencia. Se dice que el pez muere por su boca, y así le está sucediendo lastimosamente al ministro Lima. Retrocedamos nuevamente y vámonos a la conferencia de prensa que dieron en septiembre del año 2022. Iván Lima en su afán de hacer una cronología de los hechos corruptos decía: “debemos ser muy responsables en la lucha contra la corrupción, debemos actuar con pruebas, evidencias y documentos” Palabras más y palabras menos llegaba al punto que nos interesa, cuando señalaba los pagos efectuados de parte de la empresa china: El total de la coima ofrecida en el caso investigado, sería de 18 millones de bolivianos; sin embargo, aparentemente las partes acordaron que se entregue el 50% a la firma del contrato, es decir 9 millones. Pero fueron entregados 5 millones más, haciendo una suma de más de 14 millones recibidos irregularmente. Las facturas develan un primer pago efectuado el 4 de febrero por 1.470.567,13 Bs (este es el pago que seguramente se enlaza con la deuda); un segundo pago registrado el 25 de febrero por 9.396.000,00 (el 50% acordado); un tercer pago del 25 de abril por 1.059.018,89; un cuarto pago del 16 de mayo por 1.142.892,21; y un quinto pago efectuado el 11 de julio por 1.005.934,57.”

Interesante ¿verdad? 1.470.567,13 Bs pagados por los chinos en febrero según consta por la boca del ministro, se asemejan a los Bs. 1.487.659 que pago Lima al Banco Unión en el mes de mayo, la diferencia de Bs 17,000 seguramente se refieren a intereses de dos meses que tuvo que abonar el cliente. Y la diferencia del tiempo entre la recepción del dinero y el pago, seguramente pasaba por el acuerdo entre todas las partes que interesaba a quienes participarían de la repartija de esta coima, esperando los demás pagos. No nos olvidemos que el pago efectuado al banco, ese dinero nunca estuvo bancarizado como nos obligan a todos los bolivianos, o sea, nunca demostraron de donde obtuvo ese dinero Lima.

Todo este relato es simplemente una hipótesis de lo que las mentiras de todos estos personajes de la política boliviana, sobre todo de estos ministros del gabinete de Arce Catacora y la muerte del testigo protegido nos llevan a suponer que dentro de ellas se esconden ciertas verdades, que tarde o temprano se van a descubrir. En definitiva, la mentira es una conducta compleja que puede tener graves consecuencias en las vidas de las personas.

Aprender a reconocer la mentira y afrontarla de manera efectiva es fundamental para cultivar relaciones interpersonales saludables y mantener nuestra propia integridad, es lo más aconsejable, para los ciudadanos que están alejados de la podredumbre del poder político. Es fundamental ser honestos con nosotros mismos y con los demás, y tratar de cultivar una actitud de respeto y comprensión hacia los demás, caso contrario, seremos masistas mentirosos.

Mientras tanto, como dijo el diputado Venegas, también del MAS: “Habría que verificar si es que realmente el testigo protegido ha muerto o lo han matado, hay bastantes interrogantes. Lo curioso es que Lima sabe más que el acusador, pienso que tal vez existe o ha existido un plan negro para hacer desaparecer al testigo, eso habría que preguntarle a Lima, porque él sabe mucho más que el mismo acusador”.

EN LA BOCA DEL MENTIROSO TODO SE HACE DUDOSO Y EL PENSAR MAL NOS LLEVA A LA VERDAD

 

Por. Alberto De Oliva Maya