En Florida, Biden ataca a Trump sobre el derecho al aborto

Joe Biden volvió a arremeter este martes contra Donald Trump, su rival en las próximas elecciones presidenciales de noviembre, por el retroceso del derecho al aborto en Estados Unidos, uno de los principales ejes de la campaña del mandatario demócrata.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pronuncia un discurso de campaña sobre el derecho al aborto en Tampa (Florida), Estados Unidos, el 23 de abril de 2024
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pronuncia un discurso de campaña sobre el derecho al aborto en Tampa (Florida), Estados Unidos, el 23 de abril de 2024 © ANDREW CABALLERO-REYNOLDS / AFP

Fuente: RFI

 



 

«Los votantes van a pedir cuentas a Trump», declaró Biden en Tampa, en Florida (sureste), durante un acto celebrado en una universidad.

Poco después de que Trump abandonara el tribunal donde se le juzga en Nueva York por pagos ocultos a una exactriz porno, el presidente lo acusó de hacer retroceder a las mujeres estadounidenses «160 años en el tiempo».

Tomando como ejemplo Florida, donde el aborto estará prohibido después de las seis semanas de embarazo a partir del 1 de mayo, Biden aseguró: «Una persona es responsable de esta pesadilla; y lo reconoce y se jacta de ello: Donald Trump».

El exmagnate, de 77 años, elogia con frecuencia el hecho de que la Corte Suprema anulara en 2022 la protección federal del derecho al aborto. Una decisión que fue posible porque, durante su mandato (2019-2021), el entonces presidente republicano inclinó el alto tribunal hacia el bando conservador con el nombramiento de tres de sus nueve jueces.

Trump «describió (esta reversión de la jurisprudencia) como un milagro. Tal vez provenga de esa biblia que intenta vender….. Casi estuve tentado de comprarla para ver qué contenía», dijo Biden, refiriéndose a una operación de recaudación de fondos lanzada recientemente por su rival, quien se ha asociado con una estrella de la música country para comerciar ese libro religioso.

El presidente Biden, un católico practicante, se ha convertido en uno de los defensores más enérgicos del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo, muy consciente de que se trata de una de las principales debilidades políticas de Trump.

El republicano intenta encontrar un equilibrio entre una opinión pública estadounidense favorable en su mayoría al derecho a abortar y la parte de su electorado que proviene de la derecha religiosa.

Ganar en Florida

Desde la sentencia de la Corte Suprema, una veintena de estados del país han prohibido o restringido con dureza el acceso al aborto.

Muchos conservadores quieren ahora que Trump, si es elegido, defienda una ley que prohíba el aborto en todo el territorio federal. Pero el expresidente se ha negado a hacerlo, argumentando que la jurisdicción debe seguir siendo de los estados.

«No se trata de los derechos de los estados, se trata de los derechos de las mujeres», zanjó Biden este martes, señalando que todos los referendos locales sobre el tema habían respaldado el derecho al aborto.

El presidente predijo que Florida se añadiría a la lista. Los habitantes del estado podrán elegir en los comicios del 5 noviembre si amplían o no el plazo legal para abortar, después de que la Corte Suprema estatal permitiera la celebración de un referéndum sobre este asunto.

Y el equipo de campaña de Biden sueña con un impulso lo bastante fuerte como para que el estado caiga en manos del demócrata.

«Creo que se puede conseguir», dijo el mandatario en Tampa, a pesar de que Florida ha votado dos veces a Trump, en 2016 y 2020.

«Florida no es un estado fácil de ganar, pero (Biden) puede hacerlo», había llegado a decir el 1 de abril su jefa de campaña, Julie Chávez Rodríguez.

El estado del sureste ha sido durante mucho tiempo un estado péndulo, que podía inclinarse hacia la derecha o la izquierda en las presidenciales. Pero Florida se ha afianzado más en el lado conservador en las últimas elecciones.