Vigilancia gremial en la Pérez Velasco. Foto: Brújula Digital
Fuente: Brújula Digital
Alissya Guerrero
Brújula Digital visitó la zona y conversó con algunas vendedoras que informan que detrás de los hechos delictivos están, sobre todo, personas llegadas del exterior y en situación de calle. Exigen a las autoridades deportar a quienes estén involucrados en los ilícitos.
Trinidad Morales, dirigente gremial, pide mayor control y acciones de Migración para evitar la permanencia de extranjeros indocumentados y dedicados al delito. “Deberían deportar. El mercado es otra desgracia ahí adentro es puro delincuentes”, afirmó
El secretario General de la Asociación Santa Teresita, Carlos Ríos, indicó que si bien se percibe una reducción de delincuentes, lamenta que “entren a nuestro país a delinquir y a amedrentar a nuestras compañeras y compañeros”.
Agregó que la Policía implementó controles y batidas lo que ha mejorado la seguridad en las zona; sin embargo, advirtió que el cambio no ocurrirá de la noche a la mañana.
En el mercado Lanza, comerciantes lamentan la situación que también golpea su economía, porque los clientes prefieren evitar transitar por el lugar.
“Lamentablemente la inseguridad se ha vuelto como el pan de cada día dentro del mercado, ya que vienen de afuera los indigentes a comprar bebidas, les venden y ellos mismos provocan incidentes dentro del mercado que nos perjudican a todas las personas que estamos queriendo trabajar”, afirmó María Sosa quien tiene un puesto de ropa.
Sosa añadió que los trabajos de la Policía ante este tipo de quejas “no son constantes” y que las personas en situación de calle y alcohólicas deambulan por el mercado y “amenazan” a las vendedoras.
Otro comerciante, que prefirió no dar su nombre, indicó que la delincuencia se debe a la mala edificación del mercado, que se transforma en un laberinto con recovecos, y la falta de control por parte de la Alcaldía paceña y de la Policía.
Hace dos semanas, decenas de comerciantes protestaron por la delincuencia y exigieron a las autoridades asumir medidas. En esa ocasión, el viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos, se reunió con los representantes del sector y se acordó trabajar de manera conjunta.
“Se continuará con el patrullaje policial, el incremento del personal en el módulo policial de la Alonzo de Mendoza y Mercado Lanza, se tendrá una reunión ampliada, se enviará notas a la Alcaldía para que cumpla con sus compromisos”, dijo Ríos el 26 de marzo.
A los operativos diarios de la Policía se suma el accionar de la vigilancia gremial implementada por los vendedores. Los grupos trabajan en la mañana y la tarde.
“Vigilancia gremial tenemos, no podemos confiarnos tampoco en la autoridad, si está dos horitas y luego los vemos caminar (a los antisociales) otra vez. Nosotros ya estamos susceptibles”, contó Ríos.
Las denuncias de inseguridad, al menos en el Lannza, no son recientes, recuerdan vendedoras. Informan que hace más de ocho años indicaron que el mercado se había vuelto un lugar de insalubridad, descuido e inseguridad por consumo de alcohol y venta de drogas.
A pesar de su inauguración en 2018 con una capacidad para albergar a más de 1.000 comerciantes de diversos rubros, el mercado Lanza no ha logrado ocupar todas sus casetas.
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