El Matador dejó en alto el nombre de la selección boliviana en todas las canchas que le tocó jugar. Por todas esas virtudes, Marcelo Martins es un Boliviano de Oro.
[Foto: RRSS ] / Marcelo Martins
Fuente: Unitel
Tras 20 años en el fútbol profesional, Marcelo Moreno Martins dejó las ligas mayores del balompié nacional e internacional luego de una destacada trayectoria futbolística que lo ubicó en lo más alto de Bolivia y Brasil.
Más conocido como “El matador”, las personas que lo conocen lo recuerdan como un futbolista educado, disciplinado y con ganas de triunfar en la vida futbolística.
“Era un muchacho educado que jugaba y salía todos los días a jugar y con su papá entrenaba”, contó una mujer que vio a Marcelo jugar desde muy chico.
En sus inicios, Marcelo entrenaba en la división menores de Oriente Petrolero. Ya con sus 13 años, “El Matador” conquistó a sus entrenadores por el buen juego y manejo de la pelota en los campos deportivos.
Roly Sejas, uno de sus excompañeros que también llegó a la división profesional contó que el padre de Marcelo (Mauro Martins) soñaba con ver a su hijo en altas élites del fútbol internacional. Además ya presentía que Marcelo iba a triunfar en el fútbol profesional.
“Su padre empezaba a poner el precio, el hombre gritaba que su hijo iba a vale un millón de dólares”, declaró Sejas.
A sus 16 años, Marcelo llegó a la primera división del fútbol boliviano y fue el profesor Néstor Clausen quien le dio su respaldo para debutar a su corta edad.
“Era un jugador flaquito y cuando ahora lo escucho hablar denoto que no cambió y continua con su misma personalidad. Las ganas que le ponía y tratar de perfeccionarse, le ayudó bastante”, dijo.
Tras un trabajo intenso, “El Matador” llegó al Cruzeiro de Brasil donde se consagró en una ficha clave y marcó historia en la Copa Libertadores de América que lo catapultó a llegar a Europa.
“Mi paso por Europa fue fantástico. Gane muchas cosas y aprendí demasiado”, dijo Martins en una entrevista con UNITEL.
Con un acto en Brasil, “El Matador” puso fin a su carrera deportiva siendo ovacionado por los miles de hinchas del Cruzeiro que llegaron hasta el templo del fútbol de Belo Horizonte para reconocer al goleador boliviano.
Marcelo es una historia y ejemplo de superación, sacó a su familia adelante y dejó en alto el nombre de la selección boliviana en todas las canchas que le tocó jugar. Por todas esas virtudes, Marcelo Martins es un Boliviano de Oro.