Entre Ríos vibra con la fiesta del balompié e ingresa triunfal en la historia

Una calurosa tarde no fue impedimento para que la fiesta del fútbol se manifieste en el estadio Carlos Villegas de Entre Ríos, escenario de la gran final del Torneo Apertura 2024, oportunidad en la que el club San Antonio de Bulo Bulo se alzó ayer con su primera corona en la División Profesional.

Gabriel Caero/ Betty Rojas/ Dara Calustro

Fuente: lostiempos.com



Si bien esta título aún no suma una estrella, San Antonio ya puede presumir que entró a la historia grande del fútbol nacional.

Con más de 32 grados de temperatura y una humedad del 69%, la adrenalina tomó los corazones de los hinchas del fútbol en una fiesta sin precedentes que asaltó las calles de

Entre Ríos, un hecho que hasta antes de ayer no vivió una finalísima del fútbol profesional.

Si bien disputar la final de la Copa Simón Bolívar 2023 ante GV San José concitó mucho interés, el duelo de ayer por los 3 millones de dólaresllamó a todos los habitantes del trópico y visitantes que llegaron de diferentes puntos del departamento.

Dos equipos representantes de provincia se dieron cita en un escenario que de a poco comenzó a escribir su nombre en la historia del fútbol boliviano, mucho más porque el estadio Carlos Villegas comenzó a ganar notoriedad por ser el escenario del “Matagigantes” San Antonio.

La fiesta fue dentro y fuera del estadio. Todo se puso a punto con la afición tropical y vinteña, que llegó hasta Entre Ríos con el afán de ver a su equipo triunfar, más allá de lo que sucedió en el pasado duelo de ida.

Las gradas del recinto deportivo comenzaron a teñirse de los colores del Santo entrerriano, predominante en una calurosa que quedará en el recuerdo de todos los amantes del fútbol.

Al ritmo de una banda, los aficionados empezaron a dar aliento a sus planteles y calentar un ambiente de fiesta, mientras a escasos minutos del arranque del partido aún habían largas filas de personas intentando ingresar al estadio.

El final del lance desató el júbilo de una afición hambrienta de éxitos deportivos.