Al igual que otros políticos y expertos en hidrocarburos, el gobernador cruceño afirma que en el país se utiliza una cantidad de etanol superior a la soportada por los motores de los vehículos.
Un surtidor en la ciudad de Santa Cruz. Foto: La Razón
Boris Bueno Camacho / La Paz
El gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, fustiga al gobierno por presuntamente alterar la composición de los carburantes al añadir una mayor cantidad de etanol en la mezcla, que excede el porcentaje regulado en la ley 1098 que regula la combinación del aditivo con las gasolinas o el diésel oíl el cumplimiento de los estándares técnicos de calidad establecidos por cánones internacionales.
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El gobierno refiere que las mezclas están autorizadas por la Ley 1098, de septiembre de 2018, que norma la relación entre los aditivos y los combustibles fósiles; en consecuencia, se estableció el límite de mezcla en un 12%. Sin embargo, desde hace varias semanas, son recurrentes las denuncias de los conductores que afrontaron problemas técnicos en sus vehículos, los cuales serían originados por un incremento en la relación etanol – combustible.
Las instancias gubernamentales Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos del sector hidrocarburífero, (YPFB) y la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), han negado esas acusaciones, defendieron la calidad de los carburantes que importa el país y afirmaron que no existen riesgos para los motores de los vehículos que los utilizan, porque existen los controles correspondientes para evitar el daño en los motorizados.
“Ante la crisis, el gobierno de Arce responde con mañas en vez de dar soluciones estructurales, la alteración del combustible es un engaño a la población y una falta de responsabilidad muy grande. Los bolivianos se sienten indefensos ante un gobierno que en vez de proteger a la gente y buscar dar soluciones por el bien común, la engañan”, señala en su cuenta de la red social X el también jefe nacional de la agrupación Creemos.
El Deber publicó una investigación sobre la calidad de los combustibles. Foto: RRSS Camacho
El diputado de Comunidad Ciudadana (CC), Alejandro Reyes, comparte la percepción de Camacho respecto a que el combustible en el país es de baja calidad, debido al exceso de etanol que se mezcla con la gasolina lo que está generando serios problemas en el parque automotor del país; afirma que, mientras en los países vecinos la proporción máxima permitida de etanol en la gasolina es del 10%, en Bolivia se encuentra entre el 23% y el 24%, poco más del doble del límite establecido.
Por ello, Camacho reitera que el gobierno intenta engañar a los bolivianos con medidas como el incremento de la proporción del aditivo en la mezcla de las gasolinas, por ello, el incremento de la desconfianza de la población hacia la actual gestión. “Es por eso que el modelo masista se tiene que acabar, ya no hay confianza en sus acciones. Bolivia necesita un cambio y ese cambio vendrá con democracia y en unidad”, sentencia.