Aplazado, también en lectura

Los títulos de «Doctor Honoris Causa» que recibe Evo desde que es presidente, no le  alcanzan para mejorar su lectura, menos mal, que estas distinciones se otorgan por diversas razones y no exclusivamente por excelencia académica.

imageEl presidente Evo Morales recibió la distinción «Doctor Honoris Causa» de la Universidad de El Alto.Ocurrió el pasado 19 de diciembre. (foto ABI).

La poca práctica de lectura de Evo pone en figurillas a los técnicos del canal 7



El mensaje navideño del presidente Evo Morales puso de vuelta y media a los funcionarios del canal 7 y no era para menos. Resulta que la grabación de los aproximadamente tres minutos que duro el mensaje, tomó casi seis horas por los permanentes errores de Evo.

Resulta que al asesor de prensa de Evo, Víctor Orduna se le ocurrió que el mensaje navideño fuera leído no vaya a ocurrir que al siempre impredecible presidente le saliera enviar mensajes al “compañero niño Jesús” o a la “compañera virgen María”, muy de acuerdo al tono de sindicalista decadente que quiere imprimir a todos sus actos.

En consecuencia los técnicos del canal oficial tuvieron que instalar un “teleprompter” que es un equipo mediante el que los informativistas pueden leer sus textos sin tener que acudir al papel que a estas alturas ya resulta anacrónico.

Pero el pretendido remedio resultó peor que la enfermedad ya que el presidente no atinaba a leer más de dos palabras de corrido y nuevamente se tenía que comenzar la grabación y así hasta llegar a los límites de las desesperación.

Uno de los sufridos técnicos  que ya lleva buenos años en el antes canal estatal comentó que jamás en su larga trayectoria había sido testigo de cosa semejante y que lo mejor hubiera sido que el presidente improvisara como de costumbre ya que los resultados difícilmente hubieran sido peores.

Es que las deficiencias del presidente para la lectura se hacen cada vez más evidentes y que lo mismo ocurre con la escritura ya que es vox populi entre los funcionarios del palacio de Gobierno que Evo jamás imparte una instrucción de su puño y letra. Es conocida también su olímpica aversión hacia las computadoras con las cuales mantiene una prudente distancia.

Esta situación ha llevado a comentar a algún malintencionado que no basta con declarar a Bolivia “territorio libre de analfabetismo” sino que la ayuda “desinteresada” de los compañeros cubanos y venezolanos podría plantearse como objetivo declarar también al palacio de Gobierno “territorio libre de analfabetismo”. Sin embargo ya existe consenso respecto a que esta es una tarea mucho más difícil y existen razonables dudas de que se la pueda implementar.

A pesar de que circula ampliamente una fotografía de Evo, muy bien empilchado de cuando salió bachiller, no hay nada que nos haga suponer que fue un estudiante mínimamente aventajado.

Por lo demás se trató de un mensaje totalmente insulso, como a los que ya nos tiene acostumbrados y su pose acartonada con banda y medalla presidencial incluida indicaba, además, que no creía nada de lo que decía. ¿O en realidad no entendía nada de lo que leía?

PD/Consejo a los asesores de comunicación del palacio: No repitan el ejercicio en año nuevo, la experiencia enseña.