Detienen a otros dos de la banda de Suárez. Sospechan de vínculos con jefes policiales


Mafia: La Policía volvió a atraparlos cuando atracaban con un arma. Hace diez días los habían apresado y liberado. La FELCC busca a otros dos hombres que serían uniformados.

image La líder de la banda, la supuesta peluquera Ana Suárez, llevada ante la jueza Pérez

La Prensa. La Policía detuvo ayer dos personas vinculadas a la banda de Ana Suárez. Armín Machicado Lagos y Marina Loayza fueron atrapados cuando cometían atracos en la vía pública con una pistola 9 milímetros que pudieron haber robado a un teniente policial. Según el fiscal Marcos Vidal, ambos habían sido detenidos el 20 de diciembre, cuando fue desbaratada la banda de la supuesta peluquera. Pero en esa ocasión lograron convencer a la justicia de que no tenían relación con los monreros.



“Presenté la denuncia por robo agravado en flagrancia, porque en la mañana (de ayer) se los detuvo atracando a personas en plena vía pública, en Villa Fátima”. Ante llamados de los vecinos, concurrieron efectivos de la Policía de Auxilio y Cooperación Ciudadana (PAC), que los atraparon con el arma y un bolso recién robado a una mujer. Los oficiales también detuvieron a una estudiante de Derecho que se había metido en la detención para hacer notar las garantías legales de las personas. “Pero ya ordené su liberación porque no tenía nada que ver. No tiene ningún antecedente. En los tumultos, a veces la Policía detiene para luego hacer las averiguaciones”, dijo Vidal a La Prensa.

“Hay la seguridad de que pertenecen a la banda de Suárez. El día de la aprehensión de este grupo, Machicado y Loayza ya tenían su coartada. Dijeron que estaban en otro domicilio, donde no se hallaron objetos robados. Aunque la Fiscalía pidió que no los liberaran porque no convencía su versión, la juez (Margoth Pérez) resolvió disponer su libertad en apego a la ley”.

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

El arma que tenía Machicado “probablemente había sido robada a un teniente de la Policía en octubre pasado. Al oficial lo habían ‘pildoreado’ y le vaciaron la casa. El teniente ya se presentó y lo reconoció a Machicado como el ladrón de esa oportunidad. Esta vez no los van a liberar”. Los detenidos se encuentran a disposición del juez cautelar de turno, Róger Valverde.

La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) busca a otros dos hombres que serían uniformados, según fuentes de la institución “verde olivo”. Vidal, en cambio, sostuvo que aún no se ha establecido su pertenencia a la Policía.

Con Machicado y Loayza, son nueve los apresados por su vinculación al clan Suárez. Hay otras siete personas con detención domiciliaria, entre ellos los sargentos de la Policía Pedro Alvizu y Mario Romero, quienes pudieron haber facilitado información y armas a la banda. El fiscal solicitará que Suárez y los policías amplíen sus declaraciones para hallar a más delincuentes.

Ya habían sido aprehendidos con la banda, pero salieron libres.

Para destacar

Trece personas fueron detenidas por la banda de Suárez hace diez días. Machicado y Loayza también, pero la justicia los liberó.

La FELCC busca a dos hombres, supuestos policías, que participaron en el clan delictivo liderado por la supuesta peluquera.

Gobierno sospecha que hay jefes policiales vinculados con Ana
La líder de la banda denunció que policías encubren a delincuentes. Se instruyó una investigación para establecer otros posibles nexos entre la banda delictiva y la Policía. La Fiscalía halla a otros delincuentes.

image Los resultados. El 22 de diciembre, la FELCC mostró a parte de los miembros de la banda de Ana y su botín. Los delincuentes eran especialistas en robar en domicilios.

La Razón. Ante policías, clases, oficiales y jefes, el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, expresó sus sospechas de que los vínculos de la banda delictiva liderada por Verónica Ana Suárez con la Policía van más allá de los dos sargentos descubiertos y que, incluso, podrían llegar a jefes policiales. Ordenó una investigación interna.

“No estoy muy convencido de que los únicos policías que hayan estado implicados con esa banda delincuencial sean ese par de sargentos. Son muchos años que ha estado operando esa banda; tiene que haber una investigación rigurosa para establecer el nivel al que esa banda logró infiltrarse en la Policía”, demandó el Ministro.

Los criterios los expresó al final de un acto de entrega de equipos antidisturbios al Distrito Policial 1 de La Paz. Momentos antes, en su discurso de ocasión, también se refirió a este tema e informó que instruyó una investigación “porque si hay algunos miembros de la Policía de más alta graduación que han estado implicados (en el caso), de igual forma deben ser castigados”.

La líder de la banda, quien ocultaba su actividad tras la fachada de peinadora, rechazó los nexos con los policías, pero reveló a La Razón que “ellos, (policías, son los que) encubren a verdaderos atracadores que salen cada semana de la cárcel”.

En la misma entrevista dijo: “Me estaba rehabilitando y no me dejan. Varias veces me sacan en la prensa, o sea me están obligando en la Policía a que siga robando”. Entre el 21 y 22 de diciembre, la Policía ejecutó tres operativos en los que detuvo a once personas y desarticuló la banda delictiva liderada por Ana. Entre los detenidos estaba Giovanni Ramos, quien reveló que el sargento de Inteligencia de la zona Sur, Mario Romero, y su camarada, Pedro Alvizo, protegían a Ana. Los sargentos, según la Fiscalía, se encargaban de alertar de los operativos contra la banda delictiva que actuaba en El Alto y La Paz. Romero, quien junto a su camarada también extorsionaba a otros delincuentes, tiene un patrimonio de 250 mil dólares.

A diferencia de Romero, Alvizo “lavaba” el fruto de sus ganancias en una fábrica de gaseosas en El Alto. Ambos policías tienen amenazas de muerte en la cárcel, por lo que la justicia les otorgó detención domiciliaria.

Reportes policiales dan cuenta de que Ana tiene antecedentes delictivos desde 1996, mientras que sus policías tienen denuncias, entre otros hechos, por “convenios con los delincuentes”, en la Dirección de Responsabilidad Profesional, desde hace siete años.

La banda delictiva estaría integrada, en su mayoría, por familiares, de acuerdo a las investigaciones de la Fiscalía.

De hecho, la esposa de Alvizo, Julia Antonia Loredo, habría sido mencionada como parte del grupo. Este medio comprobó que Loredo tiene procesos judiciales por estafa y el 5 de enero del 2010 se le revocaría su libertad condicional e iría a la cárcel.

Rada anunció una profunda investigación del caso y la vigencia de un nuevo reglamento de faltas y sanciones. “Se busca que los procesos internos en la Policía sean rápidos y expeditos y, de esa manera, garanticemos la depuración de malos elementos”.

Ana heredó fama de su hermano Chino Suárez

Verónica Ana Suárez ganó respeto, en el mundo del hampa, gracias a la fama de su hermano José Luis “Chino Súarez”, quien era conocido en vida como “un pistolero de gatillo fácil, cogotero, secuestrador y asaltante”.

“Chino Súarez”, en la década del 90, emigró desde Santa Cruz. Terminó preso en la penitenciaría de San Pedro, pero por su carácter agresivo fue recluido en Chonchocoro, informaron fuentes policiales y judiciales.

El delincuente era conocido como “un pistolero de gatillo fácil, bebedor compulsivo, cogotero, secuestrador y asaltante”, precisó una fuente policial.

Entre 1993 y 1994, Ana visitaba a su hermano en la cárcel y, su agraciada figura, hizo suspirar a más de un guardia, pero al conocer que era la “hermanita” del “Chino Suárez”, nunca más se atrevían a verla, reveló la fuente.

Suárez murió en 1994. El parentesco, con el afamado delincuente, habría facilitado la incorporación, vinculación y respeto en el mundo del hampa para Ana.

Fuentes policiales también informaron que se ganó el respeto de sus cómplices, ya que además de planificar los “golpes”, participaba activamente en ellos.

Ana organizaba fiestas para reclutar a delincuentes y su relación sentimental con el policía Mario Romero le permitió organizar una estructura de protección para evitar su captura.

Dos integrantes de la banda de Ana reinciden

Los dos integrantes de la banda de Ana Suárez, puestos en libertad por la jueza Margot Pérez, fueron detenidos ayer cuando intentaban atracar a mano arma a dos de sus víctimas, informó el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de La Paz, coronel Alberto Aracena.

“En el momento en que ellos amenazaban a dos transeúntes, con un arma automática calibre 9 milímetros, fueron detenidos”, informó a la prensa el jefe policial.

El jueves, Alvín Machicado y María Andreina fueron puestos en libertad, por la jueza Pérez, porque no habría encontrado indicios de responsabilidad en su contra. Los antisociales fueron detenidos, junto a nueve miembros de la desarticulada banda delictiva dirigida por Ana.

Aracena cuestionó la decisión de la jueza y, una vez más, consideró que mientras la Policía detiene a los delincuentes; fiscales y jueces los liberan.

El jefe comunicó que en las próximas horas Machicado y Andreina serán remitidos a los estrados judiciales para su audiencia de medidas cautelares. Expresó su confianza en que ahora sí sean remitidos a la cárcel.

Aracena calificó a la organización de Ana Suárez, detenida el 21 de diciembre, como “altamente peligrosa” y con vínculos con delincuentes peruanos, colombianos, ecuatorianos y otros.