La histórica visita del Papa Benedicto XVI en Gran Bretaña costó 19 millones de dólares. En círculos políticos y sociales se critica al Gobierno Británico por este gasto momentos en que el país se está queriendo recuperar del gasto público. Por su parte el Gobierno señaló que el Papa es un invitado, descartando que este fuera pagado por su visita.
Noticias de TV: CNN.