Vuelve a calentarse la interna oficialista: la rebelde presidenta de la Cámara de Diputados, Rebeca Delgado, dijo hoy que a la Asamblea Constituyente se le olvidó incluir en la nueva CPE el “ama llunku” (no seas servil), en un disparo por elevación que le acierta a muchos representantes de su partido.
“Pusimos entre los primeros artículos de la Constitución, recordando a Tupac Katari, el ama sua, el ama llulla y ama quilla, nos olvidamos colocar los asambleístas el ama llunku porque deberíamos haberlo puesto”, dijo Delgado.
Como se recordará, la parlamentaria primero se opuso al proyecto de Ley de Extinción presentado por el Ejecutivo, que abrió importantes fisuras entre los empresarios de la economía informal (transportistas y gremialistas) y el Movimiento Al Socialismo, lo que derivó en una intensa polémica con el ministro de gobierno, Carlos Romero.
Más recientemente, Delgado se desmarcó de la línea oficial en el caso de la red de extorsión, consistente en restringir el asunto a los operadores intermedios, señalando la necesidad de investigar a los altos mandos.
De ahí la furia del presidente, quien la trató de “infiltrada de la derecha”, y del vicepresidente, quien dijo que el oficialismo es “un partido de revolucionarios” sin lugar para “librepensantes”. De democracia interna, ni hablar.
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Expresiones que dejan al descubierto las miserias ideológicas y morales del partido de gobierno, caracterizado por su caudillismo autoritario y su “centralismo (anti)democrático” de cuño leninista.
Hoy como ayer, y en todos los ámbitos, la cuestión es entre librepensantes y verticalistas…