Lorraine Gilles asegura en un documento legal de 128 folios que mantuvo una relación homosexual con la cantante y que además la obligó a abortar
Gilles trabajó como niñera de la excantante durante varios años a partir de 2007. En el extenso documento ella admite haber mantenido relaciones sexuales con Belafonte, pero aclara que siempre fueron en presencia y con el consentimiento de la cantante. Es más, asegura que era la misma intérprete la que pedía que su entonces esposo y la niñera mantuvieran encuentros sexuales.
En los 128 folios la niñera alemana, de 26 años, explica que a Mel B, además le gustaba grabar las escenas sexuales. «Las únicas veces que Stephen y yo mantuvimos relaciones sexuales fue cuando ella nos daba instrucciones sobre qué hacer o cuando Mel le pedía que se uniera a nosotras», escribió Gilles, revelando así que también mantenía una relación homosexual con su empleadora. «Mi relación sexual y laboral con Melanie continuó durante siete años hasta septiembre de 2016. Durante ese tiempo, ella y yo tuvimos sexo esporádicamente, aunque a veces teníamos relaciones sexuales varias veces en una semana», asegura. «Le gustaba mucho hacer de cámara y filmar los encuentros (…) yo me sentía incómoda”, afirma quién además teme que ese material salga a la luz.En cuanto al supuesto embarazo, Gilles negó rotundamente que el bebé que abortó fuera de Belafonte. «El hijo que esperaba en 2014 no era de él. El bebé fue producto de un ligue de una noche. Jamás sugerí que fuera de Belafonte, como asegura Mel B (…) Yo le conté lo que me pasaba y ella me solicitó una cita en el médico para que abortara», remata. Sin embargo, la versión de Mel B es diferente. La también juez del programa American Got Talent sostiene que su exmarido le pagó unos 300 euros para que pudiera abortar.
El pasado 17 de julio la ex Spice Girl fue condenada a pagar 40.000 dólares (casi 35.000 euros) mensuales a su exmarido, Stephen Belafonte, después de que un juez de Los Ángeles (EE UU) concediera al productor la solicitud de ayuda de emergencia en la que alega que necesita soporte económico para pagar comida, vivienda y su factura telefónica. Además, según añade la revista US Weekly, la cantante británica tendrá que afrontar el pago de los 140.000 dólares correspondientes a los honorarios de los abogados que están llevando el largo proceso de divorcio de la pareja.
Fuente: elpais.com