El censo se postergó «máximo» hasta el 2024, un año antes de las elecciones presidenciales en Bolivia.
Fuente: Unitel
Censo: el ejecutivo de la Federación de Asociaciones Municipales de Bolivia (FAM), Rodrigo Puerta considera que los dos elementos fundamentales para disminuir la politización de la actividad precensal son lograr consensos y reforzar estrategias de información.
«Informar de los procesos y del avance de la cartografía censal permitirá que en términos reales se pueda despolitizar el proceso», enfatizó Puerta.
Este miércoles el presidente del país, Luis Arce promulgó el decreto supremo para postergar el censo que inicialmente estaba previsto para noviembre de este 2022. En la normativa se detalla que el proceso se debe ejecutar máximo entre mayo y junio de 2024, un año preelectoral en Bolivia.
Añadió que la postergación permitirá que los municipios tengan más tiempo para que puedan resolver sus conflictos de límites, en especial las regiones metropolitanas.
«Hay que admitir que hay una gran responsabilidad de (los municipios) de no hacer la actividad (resolver el tema de límites). En el lapso de un año pueden resolver mucho, mucho de las áreas en conflicto. Esto tiene mucho que ver con los consensos», remarcó.