En el informe de segundo año de gestión gubernamental, el presidente Arce, terminó por convencer a todos los bolivianos, que no tiene capacidad para anticiparse al futuro y que no tiene un gran sentido de la historia, él no toma las decisiones grandes y pequeñas, porque primero tiene que consultar con las autoridades políticas que dirigen el partido azul y en última instancia la corriente evista enraizada en su partido es quien toma la decisión final.
Aunque nos muestre pérfidamente maquillajes macroeconómicos y microeconómicos, que no reflejan la realidad nacional, lo cierto es que la economía se deprime más y el hambre se extiende por todo el país, peor todavía con el paro en Santa Cruz matriz productiva del país, que hará tambalear cualquier cifra y dato económico en el informe final de la gestión 2022. Bolivia está en un proceso de estanflación creciente cada día más.
Es una gestión de gobierno del MAS para los partidarios del MAS, el MAS gobierna para los masistas, como vulgarmente lo expresa la gente, todos los programas y proyectos que ellos denominan social y para los sectores más vulnerables, no es otra cosa que la repartición y distribución de los recursos económicos de todos los bolivianos, para un grupo de dirigentes políticos y sindicales que apoyan al régimen. Programa de reactivación de la seguridad alimentaria, de manufacturas, de viviendas sociales, de reactivación de la economía, de salud, de educación, de seguridad ciudadana, de turismo, de justicia y de deporte, todos son destinados solo a los partidarios del MAS.
Los parásitos que apoyan al régimen se benefician, mientras que la nave del Estado que es de todos los bolivianos colapsa. En fin, un gobierno azul para los azules, los demás no existimos, la mayoría somos ciudadanos de segunda y ellos se creen de primera, eso es el Estado Plurinacional, un Estado – Partido nada democrático.
Es por eso que todos los bolivianos sienten un odio terrible contra su partido señor presidente y ni hablar del exmandatario, por la corrupción, el robo y el fraude electoral que están planeando para las próximas elecciones presidenciales 2025. Pero usted no se da cuenta, señor presidente, que una nueva época política se está abriendo paso a paso entre las luchas y las reivindicaciones del pueblo boliviano, el CENSO 2023 es innegociable, lo mismo que el pedido para la depuración del padrón electoral que a toda vista tiene grandes irregularidades.
El país está inconforme con la política demagógica y corrupta de usted y el exmandatario, muchos de sus dirigentes políticos y sindicales ni siquiera saben ni lo que es la sociedad boliviana, sus ministros pertenecen a un gobierno mentiroso y corrupto, pues están muy desprestigiados, ni hablar de los ministros del Castillo, Prada o Lima, que en vez de ayudarle terminarán por hundirle.
Lo cierto es que muchos líderes del gobierno, incluyendo al presidente, han adquirido mucho dinero mal habido y otras escandalosas inmoralidades, que el fiscal Lanchipa termina por encubrir. La enseñanza histórica de todo el supuesto “proceso de cambio” es que un partido político, como el MAS, puede realizar movimientos tácticos, pero no debe cometer jamás errores y horrores estratégicos.
El MAS está bastante corrompido, han vuelto a repetirse otra vez la frustración y desaliento entre los bolivianos, hemos vuelto al pasado, este camino no nos conducirá a nada bueno, el fraude como partido a todo el país es más que evidente.
Los que tienen millones son los del gobierno, además tienen a su disposición el canal gubernamental, tienen todos los contactos y todos los recursos para esa actividad de desinformación y manipulación de nuestros hermanos del área rural. No quieren CENSO 2023 porque se les cae el teatro y la retórica electoral.
Pero en este último tiempo encabezadas por Santa Cruz, las ciudades de Bolivia muestran su rechazo contra la mentira y la corrupción gubernamental, soy partidario de una República con todos y para el bien de todos, El Estado plurinacional es de un partido político y para el bien de sus seguidores y partidarios políticos, el MAS es fuerte como grupo de choque porque recurre a la violencia, pero es débil como estructura política porque ahora se encuentra dividida, el MAS está débil y vulnerable, está desmoralizado totalmente, el país entero está paralizado, sublevadas las ciudades en todas partes ese es el escenario que le espera presidente Arce, si no accede a las demandas del país.
Señor presidente, no se puede perder la noción del tiempo y la historia, empiece a aterrizar y caminar sobre tierra. A base de terrorismo político de Estado, no se gana ninguna guerra política, porque te ganas la oposición, la enemistad y el rechazo de aquellos que necesitará para conseguir la victoria.
En resumen, durante 2 horas y media aburridas trató de justificar lo injustificable, yo en dos hojas describí sencillamente lo que es su gobierno.
Jhonny Vargas es Politólogo