Latinoamérica, una región letal para el ejercicio del periodismo

De los 67 asesinatos de trabajadores de la prensa en todo el mundo en la gestión 2022, casi la mitad (30) corresponden a América Latina y el Caribe, y en lo que va de este 2023 ya son dos los periodistas asesinados, según datos del Comité para la Protección de los Periodistas (CJP, por sus siglas en inglés), con sede en Nueva York, Estados Unidos.

Fuente: lostiempos.com

Esta cifra coloca a América Latina y el Caribe como una de las regiones más mortíferas y violentas para ejercer el periodismo, puesto que las muertes documentadas, el año anterior, representan un aumento de casi el 50% comparado con 2021.



Solo en México se reportaron 13 muertes la gestión pasada, la cifra más elevada que se ha constatado en ese país durante un solo año, mientras que Haití es el segundo país con más asesinatos de periodistas, siete en total.

El Estado mexicano ha sido calificado como el peor para el ejercicio de la profesión y de acuerdo con cifras del CPJ, se han documentado 151 muertes de periodistas entre 1992 y 2002. La cifra de 2022 ha sido la mayor registrada por el organismo en un solo año.

En el caso de Haití, envuelto en una crisis humanitaria y política desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021, se ha visto un “alarmante auge en los ataques contra la prensa”. La policía haitiana fue la responsable en dos de los cinco casos documentados de muerte por ejercicio de la profesión.

Según el Comité para la Protección de los Periodistas, los trabajadores de la prensa en la región enfrentan la muerte si cubren temas como la corrupción, la violencia de las pandillas y el medioambiente.

Libertad de prensa

A este panorama sombrío para el ejercicio del periodismo se suma el deterioro de la libertad de prensa. De acuerdo con la edición 2023 de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa, elaborado por Reporteros Sin Frontera (RSF) y que evalúa las condiciones en las que se ejerce el periodismo en 180 países y territorios, hubo un retroceso en el último año.

En el documento se concluye a nivel global que la situación es “muy grave” en 31 países; “difícil” en 42 y “problemática” en 55, mientras que es “buena” o “bastante buena” en 52 países. En otras palabras, las condiciones para el ejercicio del periodismo son adversas en 7 de cada 10 países y satisfactorias sólo en 3 de cada 10.

La clasificación de Reporteros Sin Frontera muestra, a diferencia del año pasado, que ningún país de América Latina y el Caribe está en verde en el mapa de la libertad de prensa. Costa Rica, que se mantenía como el último bastión de la región con una situación “buena”, ha cambiado de categoría tras caer 5 puntos, debido a un retroceso muy marcado de su puntuación política y se sitúa por detrás de Canadá.

México es otro de los países de Latinoamérica que cayó en la clasificación este año, registra el mayor número de periodistas desaparecidos del mundo (28 en 20 años). Lo mismo ocurre con Cuba, donde la censura se intensifica y la prensa sigue siendo monopolio del Estado, se mantiene, como en 2022, a la cola de la región.

Brasil mejora

En la clasificación 2023 de la libertad de prensa destaca el avance de 18 puestos de Brasil (número 92), ligado a la salida del poder del anterior presidente, Jair Bolsonaro.

Las amenazas a la libertad de prensa

La polarización y la inestabilidad política que afectan a varios países de América Latina y el Caribe fomentan la hostilidad y los recelos hacia los medios de comunicación y, por ende, a la libertad de prensa, refiere RSF en su último informe.

Un ejemplo de lo que está pasando en la región es Perú, donde los sucesivos cambios políticos de los últimos seis años han alimentado la desconfianza de la sociedad hacia las instituciones, pero también hacia la prensa.  En otros países como Ecuador han cambiado las condiciones de trabajo de la prensa a raíz la desestabilización interna por la creciente influencia de organizaciones criminales.