Un informe de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) emitido el 9 de abril pasado, señala que las pérdidas para la campaña de verano en producción de soya asciende a los 300 millones de dólares, razón por la cual, ahora solicitarán una reunión con el Gobierno para buscar el refinanciamiento de créditos y el impulso económico para su sector
Fuente: El Diario
La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo emitió en días pasados un informe sobre las pérdidas que tendrán para la campaña de verano de la producción de soya, donde la cifra asciende a los 300 millones de dólares. Ahora, buscarán reunirse con el Gobierno para conseguir el refinanciamiento de créditos y el impulso económico para su sector.
“Se puede apreciar lo complicado que está la soya, lo que se quedó y las pérdidas ascienden entre 300 o un poco más de millones de dólares para este año”, fueron las palabras del presidente de Anapo, Fernando Romero.
El directivo señaló que buscarán reunirse con el Gobierno a la brevedad posible para abordar el tema de las pérdidas económicas y la posible reprogramación de créditos con los bancos.
“Estamos pidiendo una reunión con el Gobierno, creo que es importante analizar esto. Se verá con qué ministro, el del área sí o sí; el de Economía, será muy importante, ya que él ve el tema financiero, el tema de la banca. La idea es sumar y ellos tienen que estar presentes para dar salida a la situación complicada y que nadie la deseaba”, sostuvo Romero.
El informe de Anapo también señala que se vivió la crisis productiva más grave de los últimos 30 años y que las lluvias fueron tardes, disparejas y que son 800 mil toneladas de soya que están dentro de las pérdidas.
A causa de este fenómeno climático alrededor de 6.000 familias están afectadas e imposibilitadas de cumplir sus obligaciones financieras con la banca, proveedores de insumos y con la agroindustria que los financian.
Ante esta situación, la segunda semana de abril, Anapo hizo un llamado a las autoridades nacionales para que se puedan gestionar medidas paliativas para contrarrestar el impacto económico que generará las pérdidas por sequía.
Fuente: El Diario.