La migración tiene rostro de mujer y el año pasado envió $us 1.287 millones al país

En España los bolivianos se dedican a oficios industriales, como pintura y construcción. Las bolivianas trabajan en hogares haciendo limpieza o cuidando niños. Hasta 2020, casi un millón de compatriotas salieron del país.

Ivan Alejandro Paredes.

 



Fuente: El Deber

Santiago Gareca decidió regresar a su tierra. Él es tarijeño y estuvo trabajando un año y nueve meses en la ciudad de Pamplona, en España. Decidió regresar por dos motivos: tratará de llevar a radicar a su familia a Europa y porque todavía estaba en situación ilegal en el país europeo. Como él, hay varios bolivianos que están en trabajos temporales en el exterior, pero vuelven por situaciones migratorias. Otros connacionales viven de manera legal y con trabajos estables en otras naciones.

Las remesas enviadas hacia Bolivia entre enero a noviembre de 2023 fueron de 1.287 millones de dólares, lo que representa la cifra más alta que se registró en los últimos diez años.

Hasta 2020, Bolivia tenía, según datos publicados por Naciones Unidas, 927.244 emigrantes, lo que supone un 7,77% de la población nacional. Si se compara con el resto de los países, vemos que tiene un porcentaje de emigrantes medio, ya que está en el puesto 108 de los 195 del ranking de emigrantes.

La migración es más femenina: 491.909 mujeres, lo que representa un 53.05% del total de migrantes. Mientras que la migración masculina llegó a 435.335, que son el 46.94%.

La migración de Bolivia se ha dirigido especialmente a Argentina, donde van el 45,63%, seguido de lejos por España, el 17,25% y Chile, el 13,89%.
Juan Carlos Ramírez, director de la organización World Vision, informó que desde 1970, el boliviano está migrando con bastante frecuencia a determinados países, entre ellos los de mayor migración son Argentina, seguido de Brasil y Chile en la región. Más allá, están Estados Unidos y España, como principales destinos.
“Hay dos tipos de personas que están yendo en sentido laboral, uno que es más operario, en la parte del sector agrícola. Por ejemplo, en el norte de Chile, se ve que los migrantes bolivianos van a trabajar al sector agrícola al igual que en el norte de Argentina, pero también se dedican al comercio, principalmente en Argentina”, detalló Ramírez.

El experto agregó que, en el caso de Brasil, Estados Unidos y España, el perfil laboral del boliviano es los sectores de la construcción y de servicios domésticos, entre ellos tareas en los hogares como cocinar, limpiar, lavar la ropa y el cuidado de niños, de personas de edad o de personas con algunas discapacidades.

Desde Pamplona

Doris Roca nació en Santa Cruz de la Sierra y radica en España hace diez años. Ella, por ahora, no quiere saber de volver a Bolivia. Sus dos hijos estudian en Pamplona y el mayor sale del colegio en 2025. Doris empezó trabajando en labores de hogar y luego estudió Enfermería en un instituto. Ahora trabaja en un centro médico.

“Estamos bien. Yo creo que el boliviano sufre mucho al iniciar y es por eso que varios compatriotas deciden regresar con algo de dinero, pero un buen número de bolivianos decide quedarse por las condiciones que hay acá y porque vemos que la situación en Bolivia no es de las mejores. Ahora mismo nuestros familiares están perjudicados por la falta de dólares”, afirmó Doris.

Pamela Fernández, jefa de oficina de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Bolivia, indicó que el perfil laboral del migrante boliviano no es estandarizado o único, pero se lo considera como “muy trabajador”.

“Normalmente los migrantes bolivianos trabajan en emprendimientos o también con contratos de servicios o mano de obra. Por ejemplo, en Chile y Argentina se trabaja en diferentes sectores como la agricultura o manufactura, este último principalmente en Argentina”, explicó Fernández.

La experta agregó que, por ejemplo, en España se ve un fenómeno de trabajo muy particular, sobre todo de las mujeres enfocado en el sector del cuidado, en su “gran mayoría”, pero también en el de construcción y servicios.
El esposo de Doris se dedica a la pintura de inmuebles, tanto de exterior como de interior.  Francisco Fernández, paceño de nacimiento, está hace tres años trabajando en una empresa que vende pinturas industriales. Él tampoco quiere regresar a Bolivia, aunque anunció que este año visitará a su familia en La Paz y Santa Cruz.

“Estamos bien acá, hay trabajo de todo. Algunos compatriotas se dedican a la construcción, creo que es una mayoría, pero también las mujeres están dedicadas en labores de hogar, que es por horas”, relató Francisco.

El boliviano dice que un sueldo promedio para un compatriota en España es de 1.800 euros, que es como 14.000 bolivianos. Francisco añade que hay trabajos por hora, pero el pago varía depende el tipo de oficio. “Algunas mujeres van a trabajar por dos horas, eso en limpieza. De esas dos horas pueden ganar entre 20 a 30 euros.

En Chile, la mayoría de los bolivianos se dedica a la agricultura. Según el Sindicato de Trabajadores Agrícolas de Chile, la población de temporeros oscila entre los 2,5 millones y los tres millones de trabajadores que se dedican a la agricultura en todo Chile, de los cuales 1,3 millones, aproximadamente, son extranjeros y de esos, más del 75% son bolivianos.

La mano de obra boliviana en el sector de la agricultura en Chile es muy requerida, no solo por el conocimiento del trato con la tierra, sino también por lo dedicado.

Fuente: El Deber