La ex asesora de la Gobernación de Santa Cruz y activista por los Derechos Humanos, Alejandra Serrate, denunció que el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, fue atropellado en sus derechos por policías que requisaron su celda y expulsaron a una de sus familiares.

En diálogo con Asuntos Centrales, Serrate aseguró que un teniente de la Policía Boliviana decomisó medicamentos y desalojó a una de sus familiares en horas de la noche, pese a que tenía permiso de visita.

“Camacho es un preso político sin sentencia y se le están violando sus derechos de forma flagrante”, dijo Serrate.

Serrate viajará mañana hasta La Paz para intentar por séptima vez una visita el Gobernador Camacho en el penal de Chonchocoro.

“Le están vulnerando su derecho a las visitas de familiares y amigos. El 1 de mayo le ha restringido sus derechos. A la madrugada ingresaron a su celda tres policías desbaratando todo lo que encontraron a su paso, incluso le decomisaron remedios fundamentales para el tratamiento de sus enfermedades”, denunció Serrate.

“A las diez de la noche un teniente ingresó al lugar para desalojar a una familiar que lo estaba visitando, pese a que no había transporte para trasladarse desde Chonchocoro hasta El Alto”, dijo la activista.

Incluso, “los hijos de Luis Fernando Camacho, que tienen menos de 25 años, les da miedo de salir a denunciar estos abusos porque temen no volver a ver a su padre”, alertó Serrate.

“Los hijos de Camacho temen represalias del Gobierno que les impida ver a su papá”, enfatizó la activista.

“La Policía le impuso una lista de familiar que lo pueden visitar. Camacho sufre una tortura blanca con grandes restricciones”, manifestó.